Ser despedido es una situación indeseable para los trabajadores. Aunque es un momento de mucha frustración, es necesario actuar correctamente, pues hay un error que puede causar consecuencias a largo plazo. ¿De qué trata? Te contamos. También te puede interesar: ¿te pueden despedir si llegas tarde a tu trabajo?
La Ley Federal del Trabajo (LFT) establece una serie de razones por las que el empleador puede despedir justificadamente a un activo. De tomar esta decisión, la empresa puede prescindir del contrato sin responsabilidades.
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No obstante, si se hace fuera de estos escenarios legalmente reconocidos se puede hablar de un despido injustificado. En este contexto, la empresa puede estar violando las reglas establecidas federalmente.
En caso de que el despido no tenga alguna razón establecida en la LFT, el trabajador debe actuar con asesoría legal, pues la empresa puede encontrar ‘soluciones’ que estén por debajo de la ley. Por ejemplo, puede ofrecer un finiquito que no sea correspondiente al trabajo realizado por el empleado.
Al ser despedido, la LFT establece que debes recibir el aguinaldo correspondiente, vacaciones y prima legal por el tiempo laborado. Estos convenios no son negociables, sino que son obligatorios. En caso de no obtener estos ingresos, puedes meter una queja ante Conciliación.
El empleado debe tener la facilidad de asesorarse con algún abogado y, ante todo, se recomienda no firmar documentos cuando el despido sea injustificado, pues de hacerlo se puede considerar como 'finalizado' cualquier conflicto a futuro. Si la situación lo amerita, puede demandar a la empresa.
Motivos justificados para un despido
El capítulo 4 de la Ley Federal del Trabajo establece los motivos por los que las empresas pueden despedir a un trabajador sin responsabilizarse. Dentro de estos casos está el violentar a algún compañero o jefe, acudir bajo los efectos del alcohol o estupefacientes, así como todos los actos que sean considerados como acoso sexual.