Ante el incremento de consultas médicas a consecuencia de malestares en la garganta y diarrea en Monterrey y su área metropolitana un grupo de especialistas alertaron a la población sobre estos padecimientos estacionales, que afectan principalmente a niño, pero también a los adultos.
Los especialistas señalaron que actualmente las consultas por alergias y problemas de salud van en aumento, ya que cada vez que las niñas y niños regresan a clases, tras la primera semana, comienzan los brotes de virus, por lo que se ha disparado el número de consultas.
Las afecciones son para menores como para los adultos, todos se transmiten entre ellos; de hecho, al estado de Nuevo León se le identifica como una tierra de norovirus y adenovirus; en la actualidad también están fuertes el sapovirus y rotavirus. Todos estos bichos afectan de pies a cabeza.
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Sapovirus y sus síntomas
El nombre del sapovirus procede de la ciudad japonesa de Sapporo, donde se detectó por primera vez en 1977, tras un brote de gastroenteritis aguda en un orfanato local.
Altamente contagioso, el sapovirus se transmite por vía fecal u oral. Por ejemplo, tan solo 10 partículas bastan, en algunos casos, para desarrollar la infección; una persona enferma expulsa hasta 10 partículas por gramo en heces o vómito. Por si fuera poco, estas partículas, pueden ser fuente de contagio durante años.
Los sapovirus son la causa mayor de la gastroenteritis aguda. Sus síntomas incluyen diarrea acuosa sin sangre (si aparece es síntoma de otras infecciones más serias), dolores y calambres abdominales, vómitos, cefaleas y febrícula o fiebre baja.
Conoce al Rotavirus y sus síntomas
Las infecciones por rotavirus son frecuentes en niños de entre 3 y 35 meses, en particular entre los que frecuentan guarderías. Tanto los adultos de edad avanzada y los adultos que trabajan en centros de cuidado de niños también tienen mayor riesgo de infección.
La infección por rotavirus en general se presenta unos dos días posteriores al contagio. Los síntomas iniciales son fiebre y vómitos, seguidos de entre tres a siete días con diarrea acuosa. La infección también puede causar dolor abdominal.
En los adultos sanos, la infección por rotavirus puede causar solo signos y síntomas leves o ninguno en absoluto.
Norovirus y sus síntomas
Entre los síntomas de la infección por norovirus pueden aparecer: náuseas, vómitos, dolor o calambres estomacales, diarrea líquida o blanda, sensación de malestar general, febrícula y dolor muscular.
Los síntomas pueden aparecer entre 12 y 48 horas después de la infección; los síntomas duran de 1 a 3 días. Uno de sus grandes riesgos es que el paciente puede seguir excretando el virus en las heces hasta varias semanas después de la recuperación.
En algunos casos puede tratarse de una “enfermedad ciega”, pues es posible que algunas personas con infección por norovirus no presenten signos ni síntomas, sin embargo, pueden contagiar el virus a otras personas.
Las maneras en las que una persona puede contraer la infección por norovirus es a través del consumo de alimentos contaminados, por tomar agua contaminada, en el caso de que se toque la boca con sus manos después de que estas estuvieran en contacto con una superficie o un objeto contaminado. Además, el contagio también puede producirse por estar en contacto estrecho con una persona infectada.
Adenovirus y sus síntomas
De entrada, hay que señalar que las personas debilitadas en su sistema inmunitario o con enfermedades respiratorias o cardiacas existentes tienen un riesgo más alto de enfermarse gravemente a causa de una infección por adenovirus.
Los adenovirus pueden causar una infección de leve a grave, aunque enfermarse la forma grave de la infección es la menos frecuente.
Sus síntomas son similares a los del resfriado o la influenza, pero puede causar fiebre, dolor de garganta, bronquitis aguda, neumonía, conjuntivitis y gastroenteritis aguda.