A todos nos gusta tomarnos una buena cerveza, ya sea en la casa viendo algún partido, o en algún bar o restaurante con los amigos, pero, aunque tiene un delicioso sabor, puede traernos algunos problemas de salud.
Entre los problemas más comunes se encuentran el aumento de peso, ya que la cerveza contiene calorías vacías que pueden contribuir a la obesidad. Además, el consumo excesivo de alcohol puede afectar la función hepática, provocar trastornos en la digestión y aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares. A nivel psicológico, el abuso de la cerveza puede llevar a la dependencia y a trastornos del estado de ánimo, como la ansiedad y la depresión.
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Diversos estudios hablan sobre lo que puede ocasionar el consumo de cerveza y otros alcoholes. El cerebro puede sufrir alteraciones en la comunicación de las neuronas, lo que puede llegar a afectar la memoria y la capacidad de aprendizaje. Estos descubrimientos hablan de la importancia de moderar el consumo de alcohol.
¿A qué edad debemos dejar de tomar?
Expertos de la salud mental sugieren que las personas deben considerar no consumir alcohol a los 25 años, ya que esa es la edad en la que el cerebro humano aún está en proceso de desarrollo y es vulnerable a los efectos nocivos de esta bebida.
Recomiendan que los jóvenes se abstengan de consumir alcohol en exceso, ya que esto puede interferir con el desarrollo adecuado de habilidades cognitivas y emocionales.
Tomar alcohol en exceso puede provocar incluso hasta demencia, así lo advierte el neurólogo Dr. Richard Restak, quien lo menciona en su libro "Complete Guide to Memory: The Science of Strengthening Your Mind".
El experto señala que al llegar a los 70 años es de suma importancia no consumir alcohol, ya que a partir de los 65, comenzamos a perder neuronas de forma acelerada, por lo tanto es crucial cuidar las que aún nos queden.