Cada vez se ha hecho más frecuente ver a perros paseando huesos o cráneos humanos por las calles de distintas ciudades en México, pero ayer uno sorprendió al llegar a una fábrica y paralizar a los trabajadores en Apodaca, Nuevo León.
Juan Manuel Morales, de 32 años, informó a las autoridades que por la mañana, aproximadamente a las 9:30, recibió el informe de que un perro había ingresado al patio de la empresa con un hueso que parecía a la distancia ser de un humano.
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El animal llevaba en su hocico el antebrazo y la mano de una persona en un avanzado estado de descomposición.
La Fábrica Industrial Maderera (FIMSA), ubicada en la avenida Las Nuevas Puentes, en la Colonia Río Pesquería, fue el lugar al que llegaron elementos del Instituto de Criminalística y Servicios Periciales, de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) y policías.
Los restos humanos habrían sido hallados por el perro en los alrededores del Río Pesquería, pero aunque lo buscaron por la zona, no pudieron encontrar nada.