A escala global, se encienden las alertas sanitarias por la presencia de la llamada ‘supergripe H3N2’. Es a tal grado el nivel de preocupación que un país en Europa ha indicado el regreso de los cubrebocas entre sus ciudadanos para cortar el posible flujo de contagios.
La petición fue dada por el Reino Unido, uno de los países donde se han reportado casos de la gripe H3N2. Con la imposición sanitaria, se espera que se pueda blindar a la ciudadanía y evitar brotes pronunciados, como sucedió en la emergencia por Covid-19.
Además del Reino Unido, la ‘supergripe’ ha sido detectada en regiones como España, Japón y en el Continente Americano en Estados Unidos y Canadá. La precaución de las autoridades cobra aún mayor grado al considerar que esta temporada final del año es cuando más se propician los vuelos internacionales, por lo que la expansión del virus puede darse.
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¿Qué síntomas tiene la ‘supergripe H3N2’?
Los síntomas que se presentan en una persona infectada por la ‘supergripe H3N2’ son bastante similares a un cuadro de resfriado común, pero estos se intensifican y perduran. Las ‘pistas’ son las siguientes:
- Fiebre, tos seca, dolor de garganta, cabeza y músculos, fatiga extrema, congestión nasal, escalofríos y sudoración; en casos complicados, se podrían presentar infecciones en el oído o pecho, así como neumonía.
Al igual que como ocurrió con el Covid-19, hay ciertos grupos poblacionales que son más propensos a contagiarse, en este caso de la gripe H3N2, entre los que destacan: mujeres embarazadas, adultos mayores, niños menores de 5 años, personas con padecimientos pulmonares o cardíacos, pacientes con enfermedades hepáticas, hematológicas, renales, metabólicos o de neurodesarrollo.
Para evitar la propagación de la ‘supergripe H3N2’ es pertinente extremar medidas sanitarias como el lavado de manos, el uso de cubrebocas, evitar el contacto con personas enfermas, desinfección de lugares comunes y, por protocolo, protegerse al toser o estornudar.