En una preocupante escalada de tensión, un tanque del ejército boliviano derribó las puertas de la sede del Ejecutivo en La Paz a las 15:51 horas de este miércoles 26 de junio, tras las amenazas del comandante general del Ejército, Juan José Zúñiga, de tomar la sede del Gobierno y cambiar el gabinete. Este incidente ha desatado una ola de reacciones tanto dentro como fuera del país.
Intento de golpe de Estado en Bolivia
El expresidente Evo Morales denunció el ataque en X (antes Twitter), afirmando que un grupo de francotiradores ha tomado la Plaza Murillo en La Paz. “Esto pareciera indicar que prepararon con anticipación el Golpe de Estado. Pido al pueblo con vocación democrática a defender la Patria de algunos grupos militares que actúan contra la democracia y el pueblo”, escribió Morales, haciendo un llamado a la movilización ciudadana.
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El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), conocido por su apoyo constante a Bolivia, también se pronunció en contra del ataque militar.
Manifestamos la más enérgica condena al intento de golpe de Estado en Bolivia. Nuestro total apoyo y respaldo al presidente Luis Alberto Arce, auténtica autoridad democrática de ese pueblo y país hermano
A esta condena se unió Marcelo Ebrard, próximo secretario de Economía en el gabinete de Claudia Sheinbaum, quien expresó: “Todo apoyo y simpatía al Presidente Constitucional Luis Arce Catacora quien hace frente a nuevo intento de Golpe de Estado”.
Luis Almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), también emitió una enérgica condena a las acciones del Ejército boliviano. “La Secretaría General de la OEA condena de la forma más enérgica estas acciones del Ejército boliviano, el mismo deberá someterse a la autoridad civil como manda la Carta Democrática Interamericana”, afirmó el funcionario, reiterando su solidaridad con el presidente Luis Arce.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, manifestó su apoyo a Bolivia tras una conversación con Luis Arce y el expresidente Evo Morales. “Estamos, desde Venezuela, denunciando un golpe de Estado contra la democracia boliviana”, declaró Maduro durante un acto en el estado de Lara.
Lula da Silva, presidente de Brasil, también se pronunció, subrayando que “en América Latina, los golpes nunca funcionaron”. Lula pidió a su canciller Mauro Vieira recopilar información antes de emitir una posición formal del gobierno brasileño sobre los acontecimientos en Bolivia, pero reiteró su defensa de la democracia en la región.
El intento de golpe de Estado en Bolivia ha suscitado una fuerte reacción internacional, con líderes de América Latina uniéndose en condena a las acciones militares y expresando su apoyo a la continuidad democrática en el país. La situación continúa desarrollándose, y se espera que las tensiones persistan mientras se busca una resolución pacífica y democrática.