El pez catán es un ejemplar que habita en los cuerpos de agua norteamericanos desde hace más de 100 millones de años y desde que la pesca comenzó como un método de alimentación, supervivencia y deporte, el conocido fósil viviente se ha convertido en un trofeo a lograr por muchos pescadores.
Depredadores natos, los catanes son peces agresivos a la hora de buscar alimento, los convierte en una especie de cuidado, aunque no se han registrado ataques directos a humanos, se debe de tener cuidado con la mordida de estos animales, no por nada son apodados peces lagarto, pues están dotados de un hocico largo y dentado en forma de sierra.
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Estos ejemplares pueden llegar a pesar 300 libras, equivalente 135 kilogramos y alzar los 2 metros con 50 centímetros de largo, aproximadamente 8 pies.
Si quieres pescar uno de estos monstruos del río, deberás saber que existen cinco especies de este, el catán común, catán narigudo, catán nariz corta, catán de Florida o pinto, y todos estos te darán una batalla feroz.
¿Cómo pescar un catán?
Prepárate para una batalle férrea e identifica el sitio donde habita el catán, y establece como un lugar seguro.
Al ser un pez muy grande puedes preparar un anzuelo triple para que se enganche fácilmente.
La línea de pesca debe de ser acerada para evitar que este la rompa.
Ahora solo falta la carnada, puedes utilizar carne, vísceras, sangre o restos de peces, cumpliendo esto, lo que resta es esperar y tener paciencia.