Desde las primeras horas del lunes, cientos de fieles comenzaron a llegar a la plaza de San Pedro en espera de que abrieran la basílica vaticana, para dar el último adiós al Papa Emérito Benedicto XVI.
Laicos, religiosos, turistas, residentes y familias enteras hicieron fila, desde las cinco de la mañana, ante los detectores de metales de la plaza para presentar sus últimos respetos a Joseph Aloisius Ratzinger, quien murió el 31 de diciembre del 2022 a los 95 años.
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Una mujer romana, dijo a un medio local: Fue nuestro maestro, nuestro pastor, así que es justo reconocerlo y saludarlo.
Muchos de los presentes, también reconocieron la faceta del Pontífice como teólogo, pianista, y políglota, pues hablaba diez idiomas, dominando al menos seis: alemán, italiano, francés, latín, inglés y español. Además, leía el griego antiguo y el hebreo.
P. Andrea, párroco de El Vaticano, señaló:
Benedicto es un padre, pero es reduccionista decir que sólo era un hombre inteligente y culto. Era un hombre de Dios y realmente nos enseñó a pensar como cristianos. Es un sabio de Dios y no se puede dejar de ir a despedirse de él.
Cambian vestiduras con las que será enterrado
Algo que llama la atención en el velorio de Ratzinger, es que no lleva la llamada “cruz pastoral” o cruz del pescador, el bastón que portan los papas, pues de acuerdo con fuentes religiosas, esto se hizo para comunicar que el papa no se encontraba en funciones.
Sería el primer entierro de un papa emérito en la historia en una cripta de San Pedro, por lo cual, habría sido necesario establecer nuevas normas.
Tampoco porta el palio papal, una cinta circular con cruces que los papas llevan sobre los hombros. En cambio, fue vestido con la sotana blanca que utilizó desde su elección al trono de Pedro en 2005. Además, porta la casulla roja y una mitra blanca con un borde dorado, ambos símbolos del luto papal.
Miles de fieles católicos podrán velar por tres días el cuerpo del papa emérito Benedicto XVI en la basílica de San Pedro.