A Joseph Ratzinger se le conoció con el nombre de Benedicto XVI, desde que ocupó el cargo durante su elección en abril de 2005, días después de la muerte de Juan Pablo II, hasta su sorpresivo retiro en febrero de 2013.
El Papa Emérito, falleció este 31 de diciembre y fue elegido como el papa número 265 de la Iglesia católica.
El Vaticano permite a los papas escoger su nombre a su gusto. La mayoría lo toma de algún pontífice del pasado con el que se sientan identificados; sin embargo, otros, como el actual Papa Francisco, optan por elegir uno que no se haya usado tanto.
Ratzinger escogió su nombre pontificio debido a la admiración que sentía por su predecesor Benedicto XV.
He querido llamarme Benedicto XVI para relacionarme idealmente al venerado pontífice Benedicto XV, que ha guiado a la Iglesia en un periodo atormentado por el primer conflicto mundial. Fue valiente y auténtico profeta de paz, y actuó con extrema valentía desde el inicio para evitar el drama de la guerra y después al limitar las nefastas consecuencias
El Vaticano no ha aclarado si se invitará a los Jefes de Estado al funeral o el lugar en el que el papa emérito será enterrado, aunque presumiblemente será en la cripta en la que reposan sus antecesores en la basílica vaticana.
El cuerpo, como dicta la tradición, será colocado en tres féretros: uno de ciprés forrado de terciopelo carmesí y encajado en otro de plomo de cuatro milímetros de espesor, a su vez encajado en otro de madera de olmo barnizada.