Luego de una permanencia cerca de una semana en Escocia, llegó el féretro de Isabel II a Londres, donde el Rey Carlos y sus hermanos procedieron a escoltarlo en la procesión desde el Palacio de Buckingham hasta el Parlamento, en medio de las salvas de los cañones de artillería y las campanadas del Big Ben.
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Miles de personas se dieron cita en el centro de Londres para presenciar uno de los últimos eventos relacionados con el funeral de la que fuera la Reina Isabel II en vida, quien falleció a la edad de 96 años tras 70 a cargo de la corona británica.
El ataúd con el cuerpo de la monarca fue llevado en una lenta y solemne procesión desde Buckingham hasta Westminster Hall, donde será velado durante cuatro días. Fieles a la tradición, el Rey Carlos III y sus hermanos, Ana, Andrés y Eduardo.
Dicha actividad también pudo ser interpretada por muchos como el esperado reencuentro entre Guillermo, de 40 años, ahora príncipe de Gales, y Enrique, de 37 años, duque de Sussex, después de un desentendimiento de dos años.
Numerosas calles fueron cerradas para abarcar el masivo contingente de los súbditos de la reina; los cañones comenzaron a disparar salvas cada minuto en Hyde Park, mientras la famosa campana del Big Ben del Parlamento también sonó a intervalos de 60 segundos.
A su llegada a Westminster Hall, el féretro será llevado al interior por soldados de la Guardia de Granaderos y colocado en un catafalco. El arzobispo de Canterbury, cabeza espiritual de la Iglesia Anglicana, dirigirá un breve servicio en honor a Isabel II. Cuatro días después se celebrará el funeral, el 19 de septiembre.
Largas filas para el funeral
Desde el martes por la noche, incluso bajo la lluvia, miles de personas comenzaron a hacer fila para se uno de los primeros en pasar frente al féretro de la reina. La cola formada llega a medir más de kilómetro y medio de largo.
Entre los congregados habían muchos jóvenes, quienes formaban la fila en representación de sus padres y mostraría respetos en sus nombres, augurando una larga espera. El gobierno ha advertido que la cola podría extenderse hasta 16 kilómetros a lo largo de la orilla sur del Támesis y durar un promedio de 30 horas.
Llega el féretro de Isabel II a Londres y el Rey Carlos III con sus hermanos escoltan en la procesión para darle el último adios a la monarca.