De las bebidas más consumidas a nivel mundial sin duda es el café, ya sea por su sabor o por reanimar el cuerpo tras el cansancio por el trabajo o escuela, además es una opción para mitigar el frío pero existe una práctica llamada “Enema de café” que consiste en tomarse el líquido pero no por la boca.
Cabe señalar que el realizar de enema de café es con supuestos fines "médicos" de limpiar el recto y el intestino grueso, pero hay ciertos casos que personas realizan este procedimiento por otras razones.
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A pesar de que esta práctica es llevada por grupos de personas con el fin de la limpieza no estudios científicos que respalden la práctica ya que pudiera provocar sepsis, desequilibrio electrolítico grave, colitis, proctocolitis, ardor interno, perforación rectal e incluso abscesos cerebral o insuficiencia cardíaca.
La historia del Enema de café
En sí la limpieza rectal data del tiempo de los egipcios, incluso en 1920, científicos alemanes investigaron el efecto de la cafeína en la vía biliar e intestino delgado. El científico Max Gerson en aquellos años afirmaba que los resultados eran positivos.
Fue hasta 1990 que era algo común la limpieza de colon, los enemas de café se utilizaron como tratamientos alternativos contra el cáncer.
Pero actualmente los médicos no recomiendan esta práctica debido a que si se administra el café muy caliente pudiera haber quemaduras internas en los órganos.
La FDA ha documentado muertes por realizar la práctica por el resultado de un desequilibrio electrolítico severo, hiponatremia, deshidratación, derrames pleurales y pericárdicos. Si la persona considera que necesita una limpieza interna debe acudir con el médico especialista para que le dé los diferentes tratamientos modernos que existen.
Los enemas de café son considerados por la FDA como causantes de muertes y recomienda a los practicantes a dejar de realizar esas actividades por que pudieran estar poniendo su vida en riesgo.