Un alerta de tormenta y posible tornado sorprendió a los habitantes el centro de Texas ayer por la noche misma que se cumplió dejando severos daños.
Una estación de bomberos en Jarrell, en el condado de Williamson, fue uno de los lugares que recibieron la furia de los vientos y la severa lluvia, esta se encuentra en 155 County Road 313 y terminó sin techo ni puertas.
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A pesar de los graves daños materiales causados, por fortuna, el portavoz del condado dijo que nadie resultó lesionado.
El jefe de bomberos, Ron Stewart, comentó:
“Uno de los bomberos salió y comenzó a abrir la puerta. Dijo que las seis puertas se abrieron hacia adentro y luego cinco de ellas colapsaron”
El condado dijo que también recibió informes de que al menos dos residencias tenían partes de sus techos arrancadas. Una casa que se estaba construyendo en County Road 310 también fue derribada por los fuertes vientos.
“¡Lo superaremos juntos!” tuiteó el juez del condado de Williamson, Bill Gravell.
Fue a las 8:45 de este lunes 24 de octubre cuando se emitió la advertencia de tiempo severo y formación de tornados o torbellinos para algunas ciudades del norte del condado de Williamson.
Autoridades no tenían claro anoche si evidentemente se trató de un tornado o de vientos en línea recta, pero este martes estarán revisando la zona para saber con exactitud qué fenómeno azotó la región.
Los daños también se presentaron en las carreteras, como en la Interestatal 35, varios autos terminaron volcados por las ráfagas de viento, algunos de 18 ruedas, unidades muy pesadas.
La posibilidad de tornados o tormentas en el centro de Texas estaban vigentes hasta la madrugada de este martes, por lo pronto no se ha emitido una nueva alerta de clima para esta región.