Tener un gato es una tarea importante. No sólo basta con darle un hogar, sino que hay que alimentarlo, llevarlo periódicamente al veterinario, asearlo, etc. La integridad del felino puede estar en peligro, pues se ha hablado que los gatos pueden sufrir esquizofrenia, pero ¿esto es verdad? Esto es lo que comentan los especialistas.
Primero, la esquizofrenia es conceptualizada como una enfermedad que se caracteriza por la sensación de pérdida de contacto con la realidad. Una persona diagnosticada con este malestar puede tener alucinaciones, delirios, trastornos de pensamiento y movimiento, lo cual genera una intensa angustia.
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En el tema de los "michis" no se puede hablar directamente de una esquizofrenia, pues en su especie no existe, pero sí hay un equivalente llamado síndrome de hiperestesia felina. Según la veterinaria zootecnista de la UNAM María Daniela Hernández Padilla en entrevista para adn40, este padecimiento se trata de comportamientos neurológicos y dermatólogos en que se aumenta la sensibilidad a estímulos dolorosos. Es a tal grado que incluso las caricias pueden generar dolor en el pequeño felino.
La experta explicó que este malestar se puede presentar en cualquier edad del gato y es indiferente a la raza. Pese a ello, los estudios apuntan que es más frecuente en "michis" jóvenes y de las siguientes razas: siamés, abisinio, persona y burmés.
¿Cuáles son los síntomas?
La hiperestesia felina se puede presentar con estos síntomas, según la académica María Daniela Hernández Padilla:
- Dilatación de la pupila
- Lamidos incontrolables y violentos
- Mordidas en patas, flancos y zona perianal
- Ondulaciones en la piel del torso