El asesino se sintió poseído por una fuerza demoniaca y planeó el asesinato del admirable anciano que ni insultaba siquiera, pero su ojo de color azul más pálido le ponía en un modo listo para cometer el crimen.
Esta situación se desarrolló en uno de los cuentos más famosos del escritor estadounidense Edgar Allan Poe, titulado "El corazón delator" escrito en 1843 y republicado en 1845.
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La historia se desarrolla en un ambiente de terror y suspenso, ambientada en torno a dos personajes; un anciano noble que no había hecho daño a nadie y su vecino que planeaba su muerte por culpa de un ojo de color raro.
En este peculiar narrativa, el asesino planea el crimen durante siete largas noches; abriendo la puerta de la habitación del viejo para contemplar a su víctima.
Al octavo día, se decidió, el impulso final que necesitaba era ver ese ojo pálido una vez más y apoderado de un estupor sanguinario se dirigió hacia su víctima con la firme decisión de matarlo.
Después del brutal crimen, decidió esconder el cadáver dentro de su habitación, para eso levantó tres tablas del piso de madera de su cuarto, pero para que cupiera el cuerpo tuvo que separar la cabeza, los brazos y las piernas.
Terminado su trabajo, nadie hubiera podido decir que existía un cuerpo ya fallecido dentro del suelo, porque al finalizar había vuelto a colocar las tablas perfectamente sin sospecha alguna.
Sin embargo, otro vecino había escuchado un ruido, y había decidido llamar a la policía para que investigaran la situación, sabiendo que el anciano ya era mucho mayor.
Al llegar los policías a la casa del asesino, este comenzó a experimentar sendas sensaciones de remordimiento que no le mantenían en sus cabales, esto terminó por hacerle escuchar incluso los latidos del corazón del anciano asesinado.
El final es sorprendente, en esta historia de terror de Edgar Allan Poe, si te ha interesado, te recomendamos leerla en este enlace. Recuerda que muchas veces la realidad supera a la ficción, decía el autor que el impulso a lo perverso nos afecta a todos.