En la franja fronteriza de Los Dos Laredos, la reciente tormenta no solo bajó el sofocante calor de verano, sino que también brindó un espectáculo natural poco común: la aparición de un doble arcoíris y un atardecer hermoso
A pesar de que la lluvia comenzó como una llovizna ligera, se intensificó en una tormenta de dos horas que transformó el paisaje en un escenario digno de postal.
Tormenta deja majestuosos paisajes
El fenómeno atmosférico, captado en múltiples imágenes por residentes y visitantes con sus celulares, sorprendió a todos al presentar dos arcos de colores en el cielo.
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El doble arcoíris, resultado de una doble reflexión de la luz en las gotas de agua, mostró un arco principal y otro más tenue con los colores invertidos, un fenómeno que rara vez se observa con tal claridad.
Uno de los puntos destacados del día fue el Estadio Unitrade, donde, antes del inicio del partido entre los Tecolotes de los Dos Laredos y Monterrey, el horizonte se adornó con un enorme arcoíris.
Los aficionados aprovecharon la oportunidad para capturar el momento, creando una serie de bellas postales que inmortalizaron el evento en la memoria colectiva de la comunidad.
El evento atmosférico también ofreció un espectacular atardecer, añadiendo un toque final a una jornada inusual y mágica.
La combinación de luz, agua y óptica resultó en un espectáculo natural que encantó a todos, especialmente a los más jóvenes, quienes vieron en los arcos de colores un verdadero cuento hecho realidad.
Los habitantes de Los Dos Laredos no solo disfrutaron de un impresionante despliegue de colores en el cielo, sino también de la belleza efímera que solo la naturaleza puede ofrecer.
Este raro fenómeno servirá como un bello recuerdo en la memoria de quienes fueron testigos de su esplendor.