La naturaleza sorprende al hombre con su extravagancia, con especies de flora y fauna de verdad únicos y los reptiles son uno de los grupos biológicos más atacados y estigmatizados; las tortugas, lagartos, cocodrilos y serpientes, víboras y culebras son algunos de los ejemplares que causan asombro y curiosidad a la vez.
Uno de los grupos que fue mencionado que atrae la atención de las personas por su diversidad y facilidad de encontrar en nuestra región son las serpientes, víboras y culebras, con colores variopintos, pieles llamativas y su peligrosidad.
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Entre todas estas especies de víboras hay una que llama la atención por su imponencia y característico llamado de alerta, que avisa a los individuos y presas ¨aléjate de mí¨.
La víbora de cascabel es un ejemplo de las maravillas de la naturaleza y con presencia en casi toda Norteamérica y de los que más llama la atención por una característica en particular, su cascabel
Una de las creencias más populares acerca de este llamativo artefacto es de qué está hecho, qué contiene en su interior y qué es lo que genera ese particular sonido.
Cuando una víbora de esta especie mueve su cola, se oye un característico sonido, que asemeja a un maraqueo, por lo que muchas personas afirman que el cascabel está lleno de perdigones, pero esto no es más que una creencia popular.
En realidad, el cascabel tiene en su interior unos estuches córneos en el extremo de la cola, lo que produce el característico ruido al moverla rápidamente.
Es como si dos o tres cascabeles estuvieran dentro el uno del otro, como si de una muñeca rusa se tratara, entonces al moverlo, estos compartimentos vibran, generando ese sonido.
El fotógrafo e influencer Damianimal se dio a la tarea de demostrar qué había dentro de un cascabel.
Así también, resaltó que cada recámara o cada sección en la cola de la serpiente significa una muda más de piel y no el mito de que es un año de vida.