En Nuevo Laredo se entregó en el 2013 un Centro Oncológico de parte del estado, que debería de haber resuelto las necesidades de atención de los pacientes con cáncer, sin embargo no se construyó la segunda etapa que era esencial y no provee la quimioterapia gratuita o a bajo precio a pesar de ser gubernamental.
Gabriela Durán es una de muchas historias que se viven a diario en la ciudad; desde hace casi dos años lucha contra el cáncer de mama, es trabajadora de la Secretaria de Salud y pese a que tiene ISSSTE no cuenta con infraestructura ni especialistas para atenderse en el instituto, por lo que buscó atenderse en el Centro Oncológico pero los costos para atenderse son inalcanzables, ya que para recibir una quimioterapia tenía que pagar entre 30 a 60 mil pesos, esto dependiendo el grado y tipo de cáncer, dejando este centro estatal público en costos prácticamente a nivel de un hospital particular.
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Si bien, se cubren sólo ciertos tipos de cánceres con la Póliza del Seguro Popular, caso como el de Gabriela no, y ahí se aplica un tabulador con tarifas, que son inalcanzables para muchos enfermos.
En este caso, ella buscó la forma de salvar su vida, atendiéndose en la Ciudad de México, pero para eso tuvo que luchar con el Instituto y exigir este derecho, pero muchos de los servicios no los tiene, por lo que hace constantemente rifas para costear sus viajes de la ciudad a Monterrey y CDMX.
Fui ahí pensando que sería más económico, pero no, en este caso tuve que atenderme por el ISSSTE, pero no cuentan con muchas cosas, aún me deben la biopsia y de esto han pasado casi dos años, por lo que tengo que estar haciendo muchas actividades para salvar mi vida.
Como ella, decenas de neolaredenses tienen que vender hasta los muebles para viajar a Reynosa para una cirugía, ya que para el director Héctor Sierra, cirujano oncólogo, los dos hospitales públicos no cuentan con la infraestructura ni el personal, por lo que los pacientes y sus familiares tienen que costearse el viaje a Reynosa, y luego la estadía, mientras se recuperan del proceso quirúrgico.
En el caso de cirugía oncológica nos estamos apoyando con el Hospital de Reynosa para las cirugías, debido a que este hospital cuenta con mejor infraestructura hospitalaria, tiene mayor personal de apoyo como anestesiología, terapia intensiva, ginecología, entre otros.
Sin embargo, personal sanitario del Hospital General Solidaridad afirma que sí se hacen cirugías de mastectomías y otros tipos de cánceres que son detectadas por los ginecólogos allí; el primer paso es referirlos al Centro Oncológico y ahí el director es quien las programas y las realiza en el General.
Sierra comentó que su antecesor no era cirujano oncólogo, por lo no tenía conocimientos de la funcionalidad del Centro y él al ser quirúrgico sí, por lo que considera que no es posible operar en estos hospitales, pese a que el Civil recibió el equipo de quirófano que en su momento los clubes le dieron al Centro Oncológico y que no se instaló porque no cumplía ni con el espacio ni la normatividad, sumándole a los pacientes un costo más para trasladarse a Reynosa.
Situación por la que casi nunca está en Nuevo Laredo, ya que al ser una red estatal viaja constantemente a atender a pacientes en otras ciudades del Estado.
Además, de que Nuevo Laredo no tiene los suficientes pacientes oncológicos ni especialistas como en Matamoros y Reynosa, como para tener un centro que sólo aplica quimioterapias, la segunda etapa no fue construida, ya que no cumple con las normas ni las especificaciones y ni con ciertos permisos.