LEYENDAS URBANAS

¿Apareció su amada? Así terminó su día el Soldado Enamorado

Esteban Pérez Núñez es un veterano de guerra, originario de Laredo, Texas.

esperó a su amada, pero esta no apareció
Soldado Enamorado.esperó a su amada, pero esta no aparecióCréditos: Martha Martínez
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Escrito en NUEVO LAREDO el

Regresó una leyenda urbana de Nuevo Laredo, el Soldado Enamorado, tan solo a unas cuadras de donde vive la mujer de la que ha estado enamorado desde hace 30 años. Esteban Pérez Núñez es un veterano de Guerra, originario de Laredo, Texas, desde las primeras horas de este 14 de febrero -Día de San Valentín- se colocó sobre el crucero de Reynosa y 15 de septiembre, esperando que Cecilia, la mujer de la que se enamoró en la década de los 90’s pudiera saber de él y verla por última vez o comenzar lo que nunca inició en aquellos años.

“Solamente si está casada o si tiene hijos ya no vendré. Nunca me he casado, no tengo hijos, nunca he vivido en unión libre. Ahora me coloco más cerca, porque sé que ella vive por aquí, así podrá verme que estoy aquí esperando por ella”, dijo el veterano.

Con su uniforme impecable y un ramo de rosas en la mano, el veterano de guerra esperó a Cecilia: tras varias horas, sin importar el frío, el viento y tierra él permaneció firme desde antes de las 7:00 de la mañana hasta pasado el mediodía. El hombre, dijo tener 58 años de edad, se enamoró a primera vista de Cecilia, en su juventud, pero nunca fueron novios, él solo se enamoró de ella, pero ella hizo su vida. No es la primera vez que Esteban busca llamar la atención de la mujer, pues ya en otros años, se ha colocado en diferentes puntos.

El Marine permanece en el lugar con la esperanza de que su amada llegue. Su principal intención es reencontrarse con Cecilia, aunque en ocasiones anteriores no ha tenido éxito.

Hace muchos años se colocaba a las puertas de Expomex o el Monumento a la Madre, lugares muy concurridos y representativos de Nuevo Laredo, con la esperanza de que su amada apareciera. Por lo pronto el “Soldado Enamorado” de Nuevo Laredo, permaneció casi inmóvil con su ramo de rosas y su uniforme de gala.

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