El embargo de cuentas bancarias por parte del SAT es uno de esos temas que a muchos contribuyentes les quita el sueño. Y no es para menos: esta medida forma parte del Procedimiento Administrativo de Ejecución (PAE), un mecanismo legal que el Servicio de Administración Tributaria utiliza para asegurar el cobro de adeudos fiscales.
Aunque puede sonar extremo, no es una acción “de sorpresa” ni se aplica sin aviso. El SAT solo congela o retira dinero de tus cuentas cuando existen causas muy específicas previstas en la ley. Aun así, ignorarlas puede convertirse en un problema financiero serio.
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Para que no te agarren desprevenido, aquí te explicamos las razones más frecuentes por las que el SAT puede embargar tus cuentas bancarias. Léelas con atención: más de uno termina con cuentas inmovilizadas por descuidos que pudieron evitarse.
Por estas razones el SAT puede embargar tu cuenta
- 1. Tienes un crédito fiscal firme y no lo pagas
Si el SAT te determina un crédito fiscal (una deuda) y tú no la pagas ni la impugnas dentro de los 30 días hábiles, el adeudo se vuelve “firme”.
A partir de ahí, la autoridad puede iniciar el cobro coactivo, y sí: eso incluye embargar tus cuentas bancarias, de acuerdo con el artículo 145 del Código Fiscal de la Federación.
- 2. Impugnas, pero no presentas garantía
Si decides impugnar un crédito fiscal, debes ofrecer una garantía del interés fiscal (fianza, depósito, prenda, etc.).
Si no lo haces, el SAT puede aplicar un embargo precautorio para asegurarse de que pagues.
- 3. Ignoras notificaciones del Buzón Tributario
El Buzón Tributario no es opcional. Si no abres los avisos, los ignoras o no respondes a tiempo, el crédito fiscal puede volverse firme. Y cuando eso pasa, el SAT está facultado para inmovilizar tus cuentas.
- 4. Presentas discrepancia fiscal
Si gastas o recibes depósitos que no coinciden con tus ingresos declarados, el SAT puede determinar una discrepancia fiscal. Si no aclaras el origen del dinero, se genera una deuda… que puede terminar en embargo.
- 5. No te localizan en tu domicilio fiscal
Si el SAT visita tu domicilio fiscal y está desocupado o ya no vives ahí, la autoridad puede aplicar un embargo precautorio inmediato. Esto ocurre mucho cuando los contribuyentes no actualizan su dirección.
- 6. Tienes multas fiscales sin pagar
Declaraciones omitidas, errores o retrasos generan multas. Si no las pagas ni las impugnas, también se convierten en créditos fiscales… y pueden detonar un embargo, aunque el monto sea pequeño.
- 7. Eres responsable solidario
Socios, accionistas y representantes legales pueden responder con su propio patrimonio. Si la empresa debe impuestos y no paga, el SAT puede ir directamente contra tus cuentas.
- 8. Te opones a una auditoría o visita domiciliaria
Obstaculizar una revisión fiscal es considerado grave. En estos casos, el SAT puede aplicar un embargo precautorio para garantizar el cobro de los créditos que pudieran determinarse.
- 9. Tienes deudas determinadas por autoridades extranjeras
Gracias a acuerdos internacionales, el SAT también puede cobrar adeudos que provengan del extranjero. Sí, en estos escenarios también puede embargar cuentas bancarias en México.
- 10. No cumples con tus pagos en parcialidades
Si fallas en tres mensualidades consecutivas o no presentas tu declaración anual, se cancela automáticamente tu convenio.
Todo el adeudo se vuelve exigible y procede el embargo.
Preguntas frecuentes
¿Por qué el SAT puede embargar mi cuenta?
Porque es una medida legal dentro del PAE. Permite al SAT inmovilizar o retirar fondos para cobrar adeudos fiscales firmes o garantizar créditos pendientes.
¿Cómo evitar un embargo del SAT?
- Mantén actualizado tu Buzón Tributario
- Paga o impugna tus créditos fiscales a tiempo
- Presenta declaraciones completas y sin inconsistencias
- Evita discrepancias entre ingresos y gastos
- Atiende cualquier requerimiento dentro del plazo
