La cifra de víctimas mortales por el ataque con coche-bomba perpetrado este sábado en Coahuayana, Michoacán, aumentó a cinco, confirmó la Fiscalía General del Estado (FGE).
La agresión, presuntamente dirigida contra elementos de la Policía Comunitaria, ocurrió a plena luz del día y desató un amplio operativo de seguridad en la región.
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Hallazgos iniciales en la escena del ataque
Durante las primeras diligencias, personal de la FGE localizó dos cuerpos dentro de la camioneta utilizada como coche-bomba, presuntamente los responsables del atentado. Horas después, se confirmó que tres integrantes de la Policía Comunitaria murieron mientras recibían atención médica, elevando el total de víctimas a cinco.
Además, cinco oficiales más permanecen hospitalizados. La autoridad no ha revelado su estado de salud.
Equipos especializados investigan la explosión
Para procesar la escena, se desplegó un equipo especializado en análisis post-explosiones, que trabaja junto al Agrupamiento de Artefactos Explosivos y Materiales Peligrosos de la Secretaría de Seguridad Pública.
La Fiscalía General de la República (FGR) también inició una investigación paralela para determinar el tipo de explosivo, la posible autoría y si existe relación con grupos delictivos que operan en la zona costera y la sierra de Michoacán.
Semar despliega helicópteros, médicos y hospitales tras el ataque
Ante la gravedad del ataque, la Secretaría de Marina–Armada de México (Semar) activó su protocolo de emergencia y la Décima Sexta Zona Naval desplegó cinco aeronaves:
- Tres helicópteros MI-17 con médicos, enfermeros y personal de reacción aerotransportada.
- Un helicóptero Panther con especialistas médicos.
- Un helicóptero Black Hawk equipado con personal de sanidad naval.
De forma simultánea, los Hospitales Navales de Manzanillo y Lázaro Cárdenas fueron habilitados para recibir a los heridos. Elementos de Marina mantienen seguridad perimetral y control de accesos carreteros para proteger a la población y facilitar las evacuaciones médicas.