Claudia Sheinbaum Pardo pidió de forma oficial licencia como militante de Morena, antes de asumir la presidencia del país. La acción se realizó durante el VII Congreso Nacional Extraordinario del partido: “Seré presidenta constitucional y debo gobernar para todas y todos los mexicanos”.
Sheinbaum presentó un decálogo dirigido a la nueva dirigencia nacional, que tomará posesión el 1 de octubre. Uno de los puntos clave que destacó fue la importancia de la unidad en Morena. “Somos el movimiento social y político más fuerte de todo el mundo”, afirmó, subrayando la necesidad de mantener la cohesión interna frente a divisiones que afectan a otros movimientos.
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Hace un llamado
La próxima presidenta de México también hizo un llamado a los militantes para que se comporten con honestidad y sencillez, advirtiendo contra prácticas como el amiguismo, el influyentismo, el nepotismo y el sectarismo.
Pidió que los candidatos sean elegidos a través de encuestas y que los gobiernos emanados de Morena se comprometan a la austeridad republicana.
“Me comprometo a estar a la altura de las circunstancias, seguiremos gobernando con el principio humanista de que por el bien de todos, primero los pobres; no puede haber gobierno rico con pueblo pobre; y con el pueblo todo y sin el pueblo nada”, dijo.