En el entorno comercial mexicano, el empacador, conocido comúnmente como 'cerillo', juega un papel crucial en supermercados y tiendas de autoservicio, organizando y empaquetando productos para mejorar la eficiencia en las compras.
En 2024, la situación salarial para estos trabajadores varía según la cadena y el tipo de contrato.
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A diferencia de otros trabajos, los cerillos no tienen un salario fijo ni un contrato formal.
Son contratados de manera flexible a través de convocatorias locales o recomendaciones, operando en una modalidad freelance.
Sus ingresos dependen principalmente de las propinas que reciben de los clientes, las cuales pueden variar desde unos pocos pesos hasta montos mayores, dependiendo de la generosidad de los compradores.
Un empacador puede ganar entre 80 y más de 200 pesos diarios en un turno de 8 horas, aproximadamente 4,200 pesos mensuales, con el potencial de ingresos superiores durante los fines de semana.
Sin embargo, estas cifras son aproximadas y pueden variar considerablemente según el flujo de clientes y la tienda en la que se trabaje, haciendo que los ingresos sean tan impredecibles como los días de trabajo.