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¿Papel de baño: ¿inodoro o bote de basura?, descubre la respuesta

Desecharlo adecuadamente contribuye a mantener la higiene personal y evitar la propagación de gérmenes y bacterias

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El papel higiénico, conocido también como papel sanitario o de baño, es un elemento esencial para la higiene personal, especialmente durante nuestras necesidades.

Es crucial saber cómo desecharlo adecuadamente para garantizar comodidad máxima. Aquí se detalla la forma apropiada de desechar el papel higiénico, ya sea en un contenedor o en el inodoro.

Este producto viene en diversas variantes: presentaciones, colores, olores y tamaños, siendo comercializado por numerosas marcas. Fabricado con una combinación óptima de delgadez y resistencia, asegura una higiene impecable.

Su invención se remonta a 1855, atribuida a Joseph Gayetty, quien lo introdujo en el mercado en su forma actual, marcando un hito en la historia de la higiene personal.

¿De qué está hecho el papel de baño? 

El papel de baño se elabora principalmente con pulpa de celulosa obtenida de árboles como pinos, a veces impregnado con Aloe Vera por sus propiedades farmacéuticas. También puede contener algodón y cáñamo para aumentar su suavidad. Es texturizado, delgado y ecoamigable, conocido por su suavidad distintiva.

Inodoro vs bote de basura: Esta es la forma correcta de tirar el papel higiénico 

Una de las preguntas más comunes entre las personas es cómo desechar adecuadamente el papel higiénico usado. Según expertos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), lo recomendable es tirarlo en el inodoro para evitar la acumulación de residuos.

Depositar los restos en un bote de basura podría favorecer la proliferación de microorganismos dañinos para la salud. Al desecharlo en el inodoro, los residuos son dirigidos al sistema de drenaje donde se desintegran gradualmente, ya que la mayoría de los tipos de papel higiénico actual se descomponen en días.

Expertos de My Stateline también respaldan esta práctica, indicando que aproximadamente el 95% del papel se disuelve por completo, mientras que el 5% restante es tratado en instalaciones de aguas residuales. En contraste, desechar el papel en un bote de basura resultaría en su disposición en vertederos, contribuyendo a la producción de gas metano.