¿Estamos ante una nueva oleada de COVID-19 este verano? Las autoridades sanitarias de Estados Unidos están monitoreando de cerca la variante FLiRT, tras el aumento de hospitalizaciones reportado en el Reino Unido.
Las autoridades de salud han advertido que la variante 'FLiRT' podría desencadenar una nueva ola de infecciones por COVID-19. La última ola ocurrió en diciembre pasado.
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Entre el 9 y el 22 de junio, la variante KP.3 representó el 31,1% de los casos en el país norteamericano, convirtiéndose en la cepa dominante en la región, superando a la variante JN.1, que actualmente representa el 4,4% de los casos.
El COVID: Una amenaza latente desde 2020
Desde la primavera de 2020, el nombre COVID se ha convertido en una parte ineludible de nuestras vidas, ya sea por el temor a contraerlo o por los estragos que ha causado y sigue causando en muchas personas. Este virus mortal, conocido por primera vez a finales de 2019 en Wuhan (China), dominó la actualidad mundial durante dos años completos, mutando numerosas veces. Aunque su peligrosidad ha disminuido con el tiempo, y también su presencia en las noticias, sigue siendo una amenaza latente.
Síntomas de la nueva variante de COVID FLiRT
Los síntomas de la variante de COVID FLiRT, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), son similares a los de otras variantes. Estos incluyen fiebre, tos, congestión, secreción nasal, dolor de garganta, dolor muscular, dolor de cabeza, escalofríos, problemas respiratorios, fatiga, pérdida del olfato o gusto, "niebla mental" (sensación de menor claridad mental) y síntomas gastrointestinales.
Aunque los expertos afirman que se esperan muchos viajes en verano, muchas personas tienen previsto quedarse cerca de casa y seguir con las prácticas seguras.