Vivir en Holbox es un paraíso y es también experiencia única y maravillosa, esta pequeña isla de México es conocida por sus playas de arena blanca, aguas completamente cristalinas y ambiente calmado como tortuga, que sin duda es envidado por cualquier extranjero que conozca este pequeño pedazo de tierra sobre el mar.
¿En algún momento te has preguntado cómo viven las personas aquí? Si la respuesta es, sí, a contracción, te explicamos.
Lo primero que debes de saber es que para llegar a Holbox, hay que tomar un ferry desde el puerto de la comunidad de Chiquilá al norte de la Península de Yucatán, en el municipio de Lázaro Cárdenas.
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Al llegar podrás notar algo bastante peculiar, las calles no son asfaltadas, sino que son de arena y los únicos medios de transporte son pequeños coches 4x4, motocicletas, bicicletas y tus dos piernas, mientras que los habitantes locales son amigables y acogedores, creando una comunidad cálida y acogedora.
Sobre los habitantes de esta isla, te llevarás la sorpresa de que no usan zapatos, pues las calles de arena hacen tortuoso usarlos, los locales usan sandalias o andan descalzos.
La vida en Holbox se caracteriza por la tranquilidad y la conexión con la naturaleza, por lo que si esperas un destino con grandes hoteles y una larga vida nocturna este no es el sitio que deseas, pero puedes disfrutar de actividades como nadar con tiburones ballena, observar aves exóticas, practicar kitesurf o simplemente relajarte en la playa.
La gastronomía local es deliciosa, con una amplia variedad de mariscos frescos y platillos tradicionales mexicanos, pero la realidad es que, durante la temporada baja de turismo, algunos de los restaurantes cierran sus puertas.
Es importante señalar que hacer el súper en esta isla, puede ser una tarea tediosa, pues en ella, no encuentras todo lo necesario, lo que te lleva a embarcarte en una aventura fuera de esta para poder cumplir todos tus caprichos.
En resumidas cuentas, vivir en Holbox es como estar en el paraíso, donde la vida se disfruta a un ritmo tranquilo y se aprecia la belleza natural que rodea la isla; lugar ideal para desconectarte del mundo y recargar energías.