Un dramático incidente sacudió a la comunidad de Tegucigalpita, en el municipio de Victoria, Yoro, en Honduras, de donde es originario Erlin Hernández Ulloa, un joven de 29 años que perdió sus piernas en México en un intento por llegar a los Estados Unidos.
El trágico suceso ocurrió en Durango, cuando Erlin fue arrollado por un tren mientras intentaba cruzar ilegalmente hacia el país vecino del norte.
Hondureño pierde sus piernas y pide ayuda
La noticia conmovió a los habitantes de su pueblo de origen, pues la familia de Erlin está sumida en una profunda preocupación y dolor.
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Don Evaristo Hernández, padre del joven, ha hecho un llamado urgente a las autoridades hondureñas para que brinden el apoyo necesario y faciliten el regreso de su hijo a casa.
En una entrevista don Evaristo compartió su angustia y su esperanza de que el gobierno respalde la repatriación de Erlin y le proporcione las prótesis de piernas que necesitará para poder movilizarse.
El relato de cómo ocurrió el accidente que cambió la vida de Erlin sigue siendo difuso. Se desconoce si cayó del tren una vez abordo o si el incidente ocurrió al intentar subirse.
Duras consecuencias
Sin embargo, lo que está claro es que este joven hondureño ha sufrido las consecuencias de un viaje marcado por el peligro y la incertidumbre.
Don Evaristo también ha enfrentado obstáculos en su intento por acompañar a su hijo durante este difícil momento. A pesar de haber gestionado una visa humanitaria para poder estar junto a Erlin en el Hospital General de Gómez Palacio, en la ciudad de Durango, México, aún no ha recibido la autorización correspondiente.
Es por ello que ha hecho un llamado público para que las autoridades gubernamentales agilicen este proceso y brinden el apoyo necesario a su familia en esta situación tan delicada.
Wilson Paz, director general de Protección al Migrante, ha asegurado que se brindará toda la asistencia requerida a Erlin mientras permanezca en el hospital en México.
Busca regresar a Honduras
Además, una vez que Erlin sea dado de alta, se coordinará su retorno a Honduras junto a su familia, donde se le proporcionará una silla de ruedas y todo el apoyo necesario para su rehabilitación.
Las autoridades de la cancillería hondureña han advertido sobre los riesgos de la migración irregular, donde muchos pierden sus extremidades o se convierten en víctimas de secuestro durante su tránsito por México.
Según el Instituto Nacional de Migración de Honduras, desde el inicio de este año hasta el 14 de abril, un total de 11,612 hondureños han sido retornados, la mayoría provenientes de Estados Unidos y México.