No hay duda de que México alberga paisajes impresionantes, desde playas paradisíacas hasta encantadores pueblos mágicos. Sin embargo, hay un destino que se lleva la corona por su belleza natural, la alberca natural más espectacular del país.
Esta magnífica alberca, formada por la naturaleza hace miles de años, se halla en la cima de una montaña rica en minerales. Nos referimos a Hierve el Agua, en el estado de Oaxaca.
Su atractivo radica en las pozas de agua cristalina que, al acercarte, deslumbran con un hipnotizante azul turquesa, además de ofrecerte vistas panorámicas impresionantes.
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Hierve el Agua está situada a 72 kilómetros de la capital de Oaxaca, en el municipio de San Lorenzo Albarradas, a una altitud privilegiada en la Sierra Mixe.
El trayecto en auto desde la ciudad de Oaxaca toma alrededor de una hora y media, y el paisaje durante el recorrido es impresionante.
Este destino es famoso por sus cascadas petrificadas, formaciones únicas que se han creado a lo largo de milenios gracias al escurrimiento de agua cargada de minerales como calcio y azufre.
Al entrar en contacto con el aire, estas aguas se han solidificado, creando una ilusión de cascada suspendida en el tiempo, un fenómeno que se puede apreciar en muy pocos lugares del mundo.
Actividades en Hierve el Agua
Las principales atracciones de Hierve el Agua son sus dos albercas naturales, perfectas para nadar y relajarse. Aunque el agua puede estar un poco fría, la experiencia de sumergirse en este entorno único es inigualable.
Para quienes aman la naturaleza, hay senderos que permiten explorar los alrededores y observar las cascadas petrificadas desde diferentes perspectivas. Uno de los senderos más recomendados conduce a una pequeña cascada escondida, ubicada a solo dos kilómetros del sitio principal.
El acceso a Hierve el Agua tiene un costo de $50 MXN por persona. Para disfrutar al máximo tu visita, se aconseja llegar temprano para evitar aglomeraciones y disfrutar de las pozas con mayor tranquilidad.
Además, en los alrededores encontrarás varios servicios turísticos, como vestidores, puestos de comida y cabañas rústicas para quienes deseen pasar la noche cerca del lugar. Si prefieres, también hay áreas habilitadas para picnic, donde puedes llevar tu propio equipo y disfrutar de un día en este paraíso natural.