Como si se tratara de una película de Hollywood, un taquero de Mazatlán puso fin al sufrimiento de María Guadalupe Salacup, una madre que desde el 2019 buscaba sin descanso a su hijo Alejandro Ramírez Salacup, desaparecido en Mexicali, Baja California.
Luego de cuatro años buscando hasta debajo de las piedras, la esperanza parecía de encontrar a Alejandro parecía esfumarse, sin embargo, María mantuvo la esperanza, pues algo le decía que pronto volvería a abrazar a su hizo.
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Incansablemente, la mujer originaria de Baja California compartió en redes sociales una publicación donde pedía ayuda de la comunidad para localizar a su hijo, quien fue reportado como desaparecido y nunca regresó a su casa.
Una de estas publicaciones llegó a los ojos de un taquero en Mazatlán, quien reconoció en las imágenes del post, el rostro de quien parecía ser un joven indigente a quien constantemente le apoyaba con alimento.
Rápidamente, se comunicó con María Guadalupe, a quien le contó que un hombre con las características de su hijo, solía deambular cerca de la playa norte.
El taquero de Mazatlán estaba convencido de que se trataba de Alejandro e incluso le ofreció hospedaje a María para que fuera a identificarlo.
Una vez que llegó a la ciudad portuaria, con apoyo de la Policía, lograron localizar al joven indigente, quien tenía mucho tiempo viviendo en las calles.
El hombre fue encontrado por un elemento de la Policía Acuática, quien tras una revisión, le hizo saber que no se encontraba en problemas y que una mujer, al parecer su madre, había viajado desde Mexicali para reencontrarse con él.
Las autoridades llevaron al indigente al Centro de Seguridad Ciudadana en la colonia Huertos Familiares, donde lo entregaron al área de Programas Preventivos para presentarlo con su madre.
Luego de más de cuatro años de búsqueda y Angustia, María Guadalupe pudo terminar ese amargo capítulo en su vida, al abrazar a su hijo Alejandro, quien al reconocerla, se le lanzó para darle un fuerte abrazo.
La madre del joven, detalló que fue gracias al taquero de Mazatlán y a las redes sociales que pudo localizar a su hijo, luego de cuatro años de desaparecer en Mexicali.