En Culiacán, Sinaloa, existe un panteón que se distingue de los demás por sus opulentas tumbas, este es el Cementerio de Jardines del Humaya. Establecido en 1969, en la Calzada Heroico Colegio Militar, se tenía la idea de que fuera destino de santa sepultura para personas notables de la ciudad; sin embargo, el futuro de ese lugar terminó siendo un poco diferente.
Si caminas en el interior de este camposanto no encontrarás a escritores, artistas o deportistas; pero sí, a algunos de los personajes más peligrosos que dominaron el crimen organizado y familiares de Joaquín "El Chapo" Guzmán.
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¿Por qué una gran tumba después de la muerte?
Estas construcciones ostentosas más bien parecen palacios con finos acabados que parecieran enviar un mensaje desde el más allá, estableciendo que aún después de la muerte controlan con su poder y dinero. Y es que no es un secreto que estas personas vivieron más allá de lo común. Enormes fiestas y celebraciones, lujos y excesos; además de derroche y despilfarro, son el sello característico de los capos de la droga; así que no sorprende que lleven esta gran opulencia incluso después de la muerte.
Arturo "El Pollo" Guzmán Loera
No es una sola tumba, más bien es un complejo de edificios; cuenta, para deleite de sus visitantes, con aire acondicionado, baños, vigilancia y varias habitaciones. En este espacio es donde descansan los restos de Arturo "El Pollo" Guzmán Loera, hermano de Joaquín "El Chapo" Guzmán, asciende a un costo aproximado de un millón 200 mil dólares.
"El señor de los cielos" también está ahí
Amado Carrillo Fuentes, temido líder del Cártel de Juárez construyó su tumba, en la que actualmente se encuentran sus restos con los de su hijo. Tiene una capilla con capacidad de 50 personas para celebrar servicios religiosos y un costo aproximado de 490 mil dólares.
Arturo Beltrán Leyva, "El Barbas"
Este personaje cuenta con uno de los mausoleos más costosos con los que cuenta el Panteón Jardines de Humaya. Arturo Beltrán Leyva fue abatido en un enfrentamiento con la Marina, el 16 de diciembre del 2009 en Morelos.
Su mausoleo tiene wifi, televisión satelital, habitaciones y una cocina; su valor es superior a los 650 mil dólares.