En el estado de San Luis Potosí acaba de ocurrir un incidente que provocó la conmoción de los ciudadanos, una menor de tres años de edad fue declarada muerta en el Hospital Comunitario del municipio de Salinas; sin embargo, el diagnóstico médico estaba erróneo.
La menor de tres años de edad fue llevada por su madre a recibir atención médica de urgencia, pues presentaba vómito y diarrea, tras unas horas de haber ingresado al plantel médico, los especialistas avisaron a sus padres que Camila, su pequeña hija, había fallecido debido a complicaciones.
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Cabe mencionar que la menor ya había estado internada en el lugar con los mismos síntomas, su madre Mary Jane Mendoza relató que anteriormente llevó a Camila y solamente le recetaron paracetamol, lo que parecía haber dado un resultado favorable.
“Solo le dieron 30 gotitas de paracetamol y me dijeron que mi hija estaba bien”,
Tras el diagnóstico de muerte, la familia recibió el certificado de defunción de la menor, se estableció que murió a causa de deshidratación severa y diarrea aguda; horas más tarde la familia acudió a la ceremonia funeraria, donde descubrieron que el diagnóstico médico estaba equivocado.
Bebé despierta en su funeral
En el momento de la ceremonia funeraria los familiares estaban consternados, el llanto y la tristeza reinaba el lugar, sobre todo para la madre de Camila, quien al acercarse al ataúd sentía que "alucinaba" que su hija estaba respirando, por lo que le pidió a su madre que acudiera a revisar a la niña.
Cuando su abuela se acercó, se percató que realmente pareciera que la menor estaba respirando, por lo que pasó la luz de su celular ante los ojos de la pequeña, quien de inmediato despertó.
Ante los hechos, la familia de inmediato tomó a la menor y acudió a la enfermera de la comunidad, quien corroboró que la bebé tenía signos vitales, por lo que una ambulancia llegó a la escena.
Ya era demasiado tarde
La menor fue llevada de nuevo al Hospital Comunitario de Salinas y después trasladada al Hospital Central en la capital de San Luis Potosí; sin embargo, en el transcurso la menor falleció en el camino. El segundo certificado de defunción apuntaba a que la menor murió por edema cerebral, falla metabólica y deshidratación.
Que ella murió de muerte cerebral. Duró bastantes horas ahí en la caja, pero ahí yo siento que es culpa del doctor que me la entregó hecha por muerta.
Ahora la familia de Camila implora que se abra una carpeta de investigación por la muerte de la menor, pues argumentan que su muerte fue por una negligencia médica.
Camila se fue finalmente rodeada de sus seres queridos menos de su padre quien viajó el pasado mes de febrero a Estados Unidos para brindarle un mejor futuro. En el funeral se presentó la botarga favorita de Camilla: “Mini Mouse”.