En México, al menos uno de cada 115 niños tiene Trastorno del Espectro Autista (TEA), que son discapacidades del desarrollo causadas por diferencias en el cerebro. El comportamiento, comunicación, interacción y aprendizaje es distinto a los demás niños que no padecen esta condición. Por ello es bien importante conocer que para ayudar en su desarrollo, los padres deben considerar un aspecto muy importante, ¿cómo organizar la habitación de los niños?
La estructura visual y física de la habitación del niño con autismo es muy importante, pues comprenderá mejor lo que es su entorno, conseguirá puntos de referencia y disminuirá la ansiedad.
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Los expertos señalan que la habitación del niño debe adecuarse preferentemente en cuatro zonas.
El espacio sueño
Este espacio es muy importante y lo que se recomienda es que sea de un color distinto al de las paredes, así como del piso, para delimitar el área el rincón de espacio. De preferencia la cama debe estar pegada de uno de los costados a la pared para evitar peligros. El lugar debe significar para el niño un espacio de relajación y se recomienda que la cama esté ubicada retirada de la puerta y de las ventanas, para evitar ruidos.
El espacio trabajo/aprendizaje
Los expertos señalan que el escritorio y la silla pueden ser del mismo color, con el fin de limitar el espacio, que sepa qué ahí es exclusivo para sus tareas. Las esquinas pueden delimitarse con cinta con un color que al niño le guste. La cama, debe estar en un lugar que no sea visible para el niño cuando está en el escritorio, que no le llame la atención, pues del trabajo puede pasar a la relajación.
El rincón de juego
Se recomienda que esta área sea percibida por el niño como una zona particular. El espacio puede estar delineado con una alfombra. En ese espacio deben estar sus juguetes. Una cabaña puede ser muy útil, pues esto le dará seguridad al menor. La clave en este lugar es que los juguetes deben estar siempre al alcance y fáciles de encontrar, de manera que no le cause un conflicto o estrés.
El rincón para vestirse
El último espacio es no menos importante, y de preferencia debe estar delimitado con una pequeña silla o banco. En los cajones de su ropa, se pueden colocar pictogramas, con el fin de que el niño sepa qué es lo que hay en su interior, es decir, imágenes con calcetines, pantalones y camisas.