Los dieciséis asesinatos del norteamericano palidecen con el número de víctimas que en libertad ejecutó, destazó y comió el sujeto conocido como "El Canibal", a quien se le puede considerar el "Jeffrey Dahmer mexicano".
Durante muchos años, Andrés Filomeno Mendoza Celis fue el vecino amable y generoso de la colonia donde vivía. Sus vecinos jamás se imaginarían quién era en realidad el buen hombre que todos los días saludaban al encontrárselo en las populosas calles de Atizapán, Estado de México.
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Caníbal, el "Jeffrey Dahmer mexicano".
Mendoza Celis nació en Oaxaca y de ahí se trasladó a Atizapán después de haber ejercido varios años el oficio de carnicero.
Sin embargo, ya llevaba un tiempo dedicándose a hacer activismo social en su colonia y se dedicaba a invitar a sus vecinos a exigir mejoras en la infraestructura.
Los habitantes de Atizapán se referían a él como alguien que le gustaba ayudar y ser muy participativo. Tanta confianza le tenían que su última víctima era muy amiga de él y lo hacía parte de las fiestas familiares.
Su último feminicidio
Reyna González, de 34 años, desapareció misteriosamente el 14 de mayo de 2021 después de avisarle a su esposo, Bruno Portillo, que iría al centro por mercancía para su local, acompañada de Mendoza, el mejor amigo de su familia, quien posteriormente sería su verdugo.
Sin embargo, la mujer no regresó a su casa. Su esposo, quien también era policía, comenzó a investigar la extraña desaparición.
Por medio del GPS del celular de su esposa, el policía registró su ubicación muy cerca de la casa de Andrés Filomeno. La señal del dispositivo no alcanzaba a rastrear si habría entrado o no. Sin embargo, fue hasta la vivienda de su vecino para preguntarle sobre el paradero de su pareja.
Mendoza no dejaba que su vecino ingresara a la casa por lo que el agente entró a fuerza. En el interior se encontró con una de las peores escenas que había visto en su vida. El cuerpo desmembrado de su pareja se encontraba sobre una mesa.
Reyna González se perfiló como la primera víctima del ex carnicero... pero ese era solo el principio del horror.
Al llegar las autoridades a catear la vivienda hallaron los restos de más de diez mujeres que habían sido asesinadas por Mendoza.
Con el avance de las investigaciones, los medios de comunicación lo empezaron a nombrar el ‘Monstruo de Atizapán’.
Entre más revisiones hacía la policía más cadáveres hallaba en la casa de "El Caníbal". En un cuarto subterráneo del que se desprendía un fuerte olor a vinagre, encontraron enterrados los restos de al menos 17 mujeres más, un hombre y un menor de edad.
Más víctimas se fueron sumando al caso. Días después, la Fiscalía del Estado de México informó que había recolectado un total de 4,600 restos óseos en la casa de Mendoza y existía la posibilidad de que hubiera más víctimas en otro domicilio.
Se comía a sus víctimas
Después de su detención, Mendoza confesó que no solo mataba a sus víctimas y las cortaba en pedazos, sino que también en varias ocasiones consumía su carne. De ahí surgió el apodo del "Caníbal".
Los peritos investigadores encontraron una bitácora donde el hombre describía sus asesinatos. También encontraron videos y fotografías donde registraba sus crímenes y pertenencias de las víctimas.
Las autoridades calculan que el hombre de 72 años llevaba 30 años asesinando mujeres.
Al igual que Jeffrey Dahmer, "El Caníbal" tenía serios problemas con el alcohol. Cuando se embriagaba dejaba de ser el vecino amable que todos conocían.
Al igual que el asesino norteamericano hacía con sus víctimas, Mendoza iba a bares a encontrar mujeres y si no deseaban irse voluntariamente con él a su casa, les ofrecía dinero. Después, las asesinaba.
Similar a los vecinos de Dahmer, los colonos de la cuadra dijeron a los policías que la casa de Mendoza muchas veces olía extraño “como si estuviera quemando un perro”, por lo que los investigadores suponen que muchas de sus víctimas fueron incineradas.
Actualmente, Andrés Filomeno Mendoza Celis, "El Caníbal" cumple una condena de cadena perpetua por el asesinato de Reyna González. Sin embargo, existen investigaciones abiertas contra "el Jeffrey Dahmer mexicano" por los miles de restos de sus víctimas que fueron encontrados en su casa.