EFEMÉRIDES

2 de octubre, la fecha fatídica que la memoria colectiva se resiste a olvidar

El ataque de 1968 contra los manifestantes sigue siendo uno de los símbolos que cala hondo en el recuerdo de la sociedad mexicana

No se olvida
2 de octubre.No se olvidaCréditos: Internet
Escrito en NACIONAL el

Dicen que los mexicanos tenemos larga memoria. Hoy es 2 de octubre y para los mexicanos, es emotivo un aniversario más de la Masacre de Tlatelolco.

En 1968, México se preparaba para ser sede de los Juegos Olímpicos. Fue el baile de debutantes de la nación, los primeros Juegos Olímpicos que se realizaron en América Latina y en un país de habla hispana.

2 de octubre, la fecha fatídica

Para los poderosos, era su oportunidad de demostrar que México ya era un país moderno, no solo tierra de agricultores pobres con grandes sombreros.

Se estaban gastando millones y millones de pesos en la construcción de instalaciones de última generación y en la limpieza de la Ciudad de México.

Para distraer la atención de lo que no se podía arreglar, México recurrió a su impresionante talento artístico, creando esculturas monumentales, otras obras de arte y una de las mejores campañas de imagen vistas hasta ese momento.

Sin embargo, el entonces partido gobernante PRI de México no tuvo exactamente éxito en sus esfuerzos.

Gobierno imponía "el orden"

Los mexicanos de mediados del siglo XX estaban enfocados en otros desafíos, además de la estabilidad, como las promesas de la Constitución de 1917 aún sin cumplir.

El gobierno federal de la época, sin embargo, no tenía ningún interés en esto, solo el mantenimiento de su orden.

El gobierno estaba utilizando medidas cada vez más autoritarias e incluso violentas para contener los disturbios.

Los Juegos canalizaron el descontento no solo por todo el dinero que se había gastado, sino porque ofrecían una oportunidad tentadora de ser vistos por el mundo. El gobierno también lo sabía.

En 1968, los manifestantes aprovecharon el hecho de que las próximas Olimpiadas habían puesto los ojos del mundo en México.

Tlatelolco, la plaza se tiñó de rojo

Así, el 2 de octubre de 1968, a pocos días de la inauguración de los Juegos, miles de universitarios y bachilleres decidieron aprovechar y realizar un multitudinario mitin en la colonia Tlatelolco de la Ciudad de México, en una plaza que representa los “Tres Culturas” —indígena, colonial y moderna— con la arquitectura que lo rodea.

Se necesitarían miles de palabras para describir lo que sucedió ese día, y todavía hay un feroz debate sobre qué sucedió exactamente. Las pocas cosas que no están en debate: había militares en la zona, cuya presencia fue aumentando a medida que avanzaba el evento; hubo miles de estudiantes y otros activistas en la plaza que no terminaron la manifestación a pesar de la creciente presencia militar; comenzó el tiroteo.

Los medios de comunicación mexicanos de la época informaron únicamente la versión del gobierno de que la violencia fue iniciada por los estudiantes y que los militares simplemente se vieron envueltos en ella. Nunca se ha culpado oficialmente a los militares, pero incluso antes de la aparición de nuevas pruebas en 2000, la mayoría creía, y sigue creyendo, que se trataba de una operación militar coordinada.

Incluso el número de muertos a partir de ese día es muy discutido, pero la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) estima los muertos en más de 300 en su sitio web.

La represión política abierta duró después meses e incluso años. Se culpó a los "agitadores extranjeros", especialmente a los extranjeros que eran maestros o profesores, lo que obligó a personas como Helen Bickham, entonces profesora de inglés en el Instituto Politécnico Nacional, a huir de regreso.

2 de octubre, la fecha fatídica que la memoria colectiva se resiste a olvidar.