CIUDAD DE MÉXICO.- El Banco de México (Banxico) mejoró su previsión de crecimiento para el 2021 de 4.8 a 7 por ciento en el escenario central.
En dicho panorama, el banco central prevé que el rango de expansión del Producto Interno Bruto (PIB) sea entre el 5 por ciento y hasta el 7 por ciento ante un mejor desempeño de la economía en el primer trimestre del año respecto de lo previamente anticipado, como la expectativa de que a partir del segundo trimestre la recuperación gradual de la economía se presente con un ritmo más elevado.
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“Esto por el efecto de la fortaleza de la demanda externa, particularmente ante el cuantioso estímulo fiscal otorgado en Estados Unidos, y por la reactivación de la interna ante los mayores avances en el proceso de vacunación de la población y la gradual eliminación de las restricciones a la movilidad adoptadas para hacer frente a la pandemia”, explicó el Banxico al dar a conocer su Informe Trimestral de Inflación. De materializarse un crecimiento en el 2021 cercano a la parte superior del intervalo, que es del 7 por ciento, la actividad económica recuperaría en el último trimestre del año el nivel observado al cierre del 2019, según el reporte.
Por su parte, con un crecimiento cercano al punto intermedio de los intervalos, dicha recuperación ocurriría hacia el segundo trimestre del 2022. Es decir si el PIB logra crecer 6 por ciento. Mientras que con una expansión del 5 por ciento, la parte inferior de ambos intervalos, el nivel observado al cierre del 2019, es decir, el nivel previo de la pandemia se alcanzaría a principios del 2023.
El organismo encabezado por Alejandro Díaz de León matizó que aún prevalecen retos para la recuperación y un entorno de alta incertidumbre, porque la pandemia de Covid-19 aún no se disipa.
Los riesgos al alza que el banco central mantiene para el crecimiento de la economía destacan que la pandemia se disipe con mayor rapidez, particularmente por una campaña de vacunación efectiva, lo que apoyaría la confianza en la economía y las expectativas de una recuperación vigorosa.
También que los estímulos que se han otorgado a nivel internacional y nacional contribuyan a restaurar la confianza de consumidores e inversionistas, y, en general, a apoyar la recuperación de la economía y el comercio globales y a contrarrestar las secuelas de la pandemia. Dentro del marco del T-MEC, la mayor demanda externa esperada ante los estímulos implementados en Estados Unidos induzca un aumento en la inversión. Y por último, que se mantengan condiciones financieras globales propicias para una recuperación económica acelerada.