Hace unas semanas se reportó el primer caso de hongo negro en México, específicamente en la CDMX. Una infección que parecía lejana, pues solía darse en la India, ahora preocupa a la sociedad mexicana, ya que se trata de un organismo más común de lo que creemos.
La Secretaría de Salud ha asegurado que las infecciones con este agente son muy raras, y la muerte por hongo negro de Gregorio Avendaño en el Hospital La Raza fue un caso súbito. Sin embargo, no está de más saber cómo y porqué podríamos adquirir esta infección.
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¿Dónde se presenta el hongo negro?
Si bien, el nombre de hongo negro nos hace pensar que se trata de un champiñón oscuro, lo cierto es que se trata más bien de una pelusa blanca, grisácea o negruzca que suele acompañar a los alimentos en descomposición, en específico frutas y verduras.
Según la especialista Laura Castañón Olivares, investigadora de la Unidad de Micología del Departamento de Microbiología y Parasitología de la Facultad de Medicina de la UNAM, este tipo de hongo y sus esporas conviven con nosotros de forma natural.
Hay algunos factores importantes que hacen que estas esporas se desarrollen, como son las condiciones húmedas del ambiente. Justamente, la comida echada a perder ofrece este tipo de ecosistema favorable.
La investigadora indica que los hongos mucorales viven con nosotros flotando en el aire y, normalmente, estos son inocuos, pero también son oportunistas.
Esta infección, llamada científicamente como mucormicosis, afecta más a las personas con sistema inmune comprometido, como son las personas que tiene enfermedades crónicas, o incluso los recuperados de la covid-19.
Un hongo podría propagarse en el cuerpo humano a consecuencia la debilidad de los glóbulos blancos, células especializadas para lidiar con las infecciones.
De hecho, Laura Castañón afirma que los casos de mucormicosis son mucho más comunes en pacientes con diabetes, pues ellos no producen insulina. Al tener índices altos de azúcar en la sangre, el hongo negro se alimenta rápidamente en el organismo del paciente.
"Tienen una fuerte carga enzimática que les ayuda a alimentarse de estos cuerpos cetónicos, destruir todo lo que van encontrando a su paso: hueso, cartílago, músculo…, y, así, ocasionar las lesiones necróticas tan características de la mucormicosis” afirmó la especialista de la UNAM.
¿Cómo evitar la infección por hongo negro?
Las medidas de higiene en la casa son la forma más efectiva para evitar los contagios por hongo negro.
Tener lugares y rincones libres de humedad son necesarios para evitar la reproducción del hongo negro. Además, el no mantener comida descompuesta cerca de personas enfermas es la clave para no sufrir por esta infección.
Sin duda, el cuidado para prevenir casos de hongo negro debe enfocarse en los pacientes con diabetes o quienes recientemente se han repuesto de la infección por la covid-19.
JGR