Ante la preocupación de una llegada masiva de migrantes por la terminación del Título 42, que permite deportar a indocumentados sin necesidad de una audiencia, el cabildo decidió extender de manera indefinida la declaración de desastre firmada por el alcalde Víctor Treviño.
El pasado domingo Treviño firmó la orden de emergencia con vigencia de siete días, pero en la junta de cabildo los regidores decidieron extenderla por un mes para planear estrategias para responder a la posible llegada de miles de migrantes.
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El Título 42 dejará de aplicarse a partir del 11 de mayo, cuando termina la orden nacional de emergencia por covid emitida por el presidente Donald Trump en el 2020.
La declaración de desastre fue respaldada por el cabildo porque se consideró urgente tener un plan listo para ponerlo en práctica si comienzan a llegar cantidades extraordinarias de migrantes a esta frontera.
El doctor Treviño hizo notar que los migrantes que pueden llegar provienen de otras fronteras como Brownsville y McAllen, donde poco a poco el volumen de centroamericanos y sudamericanos detenidos comenzó a subir.
“Cuando lleguen a una cifra que ya no pueden procesar, la Patrulla Fronteriza comenzará a enviar migrantes a Laredo y aquí sólo tenemos capacidad para 2 mil como máximo, pero el problema es que los refugios ya están casi a su máxima capacidad”, advirtió.
El alcalde Treviño dijo que con la orden de emergencia se activa un plan para destinar recursos que apoyen a los refugios con la llegada de migrantes a fin de cubrir gastos de comida, hospedaje e inclusive de transporte.
El regidor Alberto Torres hizo notar que hace dos años la situación era diferente cuando llegaron miles de migrantes y que la ciudad tenía el respaldo de fondos federales por la emergencia de covid-19 y ahora ya no hay.
“Sería un golpe muy duro para la economía local tener que usar recursos municipales para hacer frente a estos gastos y luego ver si podemos recuperar algo del gobierno federal”, indicó.
En el verano del 2021 las autoridades municipales tuvieron que enviar migrantes a Houston, Austin y Dallas a un costo de 262 mil dólares tras enviar 99 autobuses con 50 pasajeros cada uno para descongestionar los refugios locales.
Durante los siguientes 30 días las autoridades locales van a monitorear a diario la situación de los migrantes y entre el alcalde Treviño, el jefe de Bomberos Guillermo Heard y el regente municipal Joseph Neeb van a decidir la estrategia a seguir.