Aunque el Condado de Webb ya tiene una morgue más amplia, el aumento en los casos de muertes de migrantes rebasó su capacidad y además, hay escasez de personal para realizar las autopsias.
El comisionado John Galo dijo que la médico forense Corine Stern solicitó a la Corte de Comisionados ayuda de forenses de medio tiempo para atender la elevada cifra de autopsias a migrantes que mueren en el territorio.
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“Ella estaba trabajando hasta 100 horas por semana y no podía descansar ni tomar vacaciones, por esta razón solicitamos apoyo de personal de medio tiempo, pero es un problema encontrar forenses, hay muy pocos disponibles”, indicó Galo.
“Tenemos una gran cantidad de cuerpos en la morgue, la doctora Stern prefiere tenerlos en los refrigeradores especiales en espera de ser identificados, la ley dice que sólo es obligatorio tener muestras de ADN pero ella prefiere tener los cadáveres”, señaló el comisionado del Precinto 3.
Cabe mencionar que con una inversión de 621 mil dólares, la morgue del condado fue ampliada hace dos años para tener más capacidad de almacenamiento de cadáveres y más espacio para realizar autopsias.
Los trabajos de construcción estuvieron a cargo de la empresa Quantcorp Construction, que se tardó unos meses para completar el proyecto.
La ampliación fue solicitada por la doctora Stern, quien solicitó apoyo porque la capacidad para autopsias se rebasó debido al incremento de muertes por Covid-19 y por indocumentados no identificados.
La gran mayoría de los cuerpos que van a dar a la morgue del condado corresponden a migrantes no identificados que son encontrados en zonas semidesérticas de Webb, casi siempre por elementos de la Patrulla Fronteriza.
La doctora Stern, directora de los servicios forenses de Webb, no incinera los cuerpos porque considera necesario tenerlos refrigerados por si acuden familiares a reconocerlos e identificarlos.
La ampliación de la morgue consistió en agregarle 800 pies cuadrados en las instalaciones forenses y administrativas, además de adquirir más refrigeradores para los cuerpos, donde hay más de 175 en espera de ser identificados.