Dmitry Nuyanzin, un influencer de la rama fitness de 30 años, perdió la vida tras someterse a un reto extremo. Su corazón no resistió la presión y dejó de latir. ¿En qué consistía la prueba que resultó ser mortal?
El oriundo de Orenburg buscaba mayor promoción para su programa de pérdida de peso. El ruso tenía una figura envidiable y llevaba un estilo de vida sano, por lo que decidió darle la vuelta: subiría drásticamente de peso para posteriormente bajarlo a base de sus ejercicios.
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El objetivo era claro: ganar 25 kilos para después convertirlos en evidencia empírica de los resultados del entrenamiento. Dmitry Nuyanzin, entonces, se despidió de los buenos hábitos alimenticios para proceder a una dieta extrema.
Dmitry Nuyanzin se alimentó, hasta sus últimos días, de pastel como desayuno; dumplings, que son bolas de masa rellenas, como almuerzo y comida; la cena, para nada ligera, estaba compuesta de hamburguesas y pizzas pequeñas. Asimismo, a lo largo del día comía botanas y papas fritas para ‘apagar’ el hambre.
Un día antes de su muerte fue al médico
Recuperan medios de comunicación que Dmitry Nuyanzin canceló sus sesiones de gimnasio un día antes de fallecer. Reportaba sentirse mal, por lo que no dudó en acudir al médico para atenderse. Fue entonces cuando su corazón dejó de latir mientras dormía.
Expertos señalan que además del efecto dañino ‘natural’ de su dieta, el cuerpo de Dmitry Nuyanzin no estaba acostumbrado a ese tipo de alimentos, por lo que las afectaciones se potencializaron hasta el punto mortal.
El caso ha generado impresiones diversas, pues cientos de internautas señalaron que se puso en peligro sin tener suficiente evidencia científica sobre lo que estaba haciendo. Asimismo, han externado su consternación sobre la calidad de contenidos que hay en internet, mismos que podrían poner en peligro a cientos de usuarios.
