El cambio en los océanos del azul profundo a un tono verdoso extraño, está generando mucha preocupación en los expertos de todo el mundo.
El cambio climático está generando este cambio, además de la actividad humana, lo que ha despertado el interés de científicos y ambientalistas.
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La Unión Europea ha implementado su Estrategia de Biodiversidad 2030 para mitigar los efectos negativos sobre los ecosistemas marinos.
¿Por qué el cambio?
La proliferación del fitoplancton puede ser uno de los factores principales. Estos organismos microscópicos flotan en la superficie del agua y, al crecer en cantidad, tiñen el mar con un tono verdoso debido a la clorofila que contienen.
El fitoplancton es clave para la vida marina, por su producción de oxígeno, además de formar la base de la cadena alimentaria oceánica.
Estudios revelaron que el cambio en los patrones de circulación oceánica y el incremento de las temperaturas están favoreciendo la proliferación de cianobacterias en el Atlántico.
¿Es grave el cambio de color?
Este cambio es mucho más que estético, ya que podría ser el principal signo visible del cambio climático. En os últimos 20 años, se ha observado que hasta el 56% de los océanos ha cambiado su color, lo que puede ser fatal para los ecosistemas marinos.
La proliferación de fitoplancton puede llevar a la formación de “zonas muertas” en los océanos, áreas con niveles extremadamente bajos de oxígeno que dificultan la supervivencia de la vida marina.
¿Qué medidas se toman para proteger los océanos?
Se espera que un 30% de las aguas puedan ser protegidas, gracias al esfuerzo y la Estrategia de la Unión Europea sobre Biodiversidad 2030,
La estrategia incluye medidas para hacer que la pesca y la acuicultura sean más sostenibles, promover energías limpias y reducir el impacto humano en los ecosistemas.