Elon Musk trasladará la Sede de SpaceX y X de California a Texas en rechazo a Ley Escolar. El empresario ha anunciado su intención de trasladar las sedes de las compañías que dirige, de California a Texas.
Esta decisión se debe a la promulgación de una nueva ley escolar en California, que prohíbe a las escuelas notificar a los padres si sus hijos expresan su deseo de cambiar el género con el que se identifican.
Elon Musk abandona California
En una serie de publicaciones en la plataforma X, antes conocida como Twitter, Musk explicó que esta ley fue el detonante de su decisión. “Esta es la gota que rebasó el vaso”, escribió el magnate.
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Además, Musk anunció que la sede de X también será trasladada a Austin, la capital de Texas. En sus publicaciones, el empresario criticó directamente al gobernador de California, Gavin Newsom, indicando que ya había advertido hace un año que leyes de este tipo llevarían a familias y empresas a abandonar el estado para proteger a sus hijos.
Musk ya ha iniciado el traslado de operaciones al sur de Texas, en la localidad de Boca Chica, cerca de la frontera con México. Allí, ha estado construyendo un poblado llamado ‘Starbase’, diseñado para albergar a los trabajadores del proyecto Starship, el cohete más grande jamás construido.
SpaceX ha adquirido numerosas hectáreas en el área y tiene planes para desarrollar edificios de oficinas y manufactura por un valor de 100 millones de dólares.
El nombre de Starbase comenzó a utilizarse ampliamente después de que Musk anunciara en 2021 que estaba creando este poblado en torno a la plataforma de lanzamiento de Starship. Este proyecto ha generado preocupación entre organizaciones defensoras del medio ambiente debido a su impacto en la región.
Esta decisión de Musk se suma a otros movimientos de grandes empresas que han optado por reubicar sus operaciones fuera de California, en respuesta a políticas estatales que consideran restrictivas. La medida también subraya la continua controversia sobre las políticas relacionadas con la identidad de género en las escuelas y el papel del estado en la supervisión de estos asuntos.
La comunidad empresarial y los residentes de Texas esperan con interés los efectos económicos y sociales de la llegada de SpaceX y X, mientras que en California, la salida de estas empresas plantea interrogantes sobre el futuro económico y la viabilidad de sus políticas progresistas.