Los mitos y leyendas urbanas sobre las arañas, a través de cientos de años, han provocado que estos animalitos sean los seres más temidos por los humanos, situación que, de acuerdo a los expertos, es injusta.
Según Rod Crawford, experto en arañas y conservador de aracnología en el Museo Burke, en Estados Unidos, gran parte de lo que se dice de estos invertebrados es un error.
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Todo lo que creíamos saber sobre las arañas es falso
Todo lo contrario, ya que la voz de los estudiosos de este tema, nos dice que, hay que darles un agradecimiento especial, debido a que juegan un papel muy importante dentro de los ecosistemas.
A continuación, te presentamos seis mitos sobre las arañas que hay que desechar.
Primer mito: las arañas son insectos
En primer lugar, estos invertebrados no son insectos. Las arañas pertenecen a una clase completamente distinta llamada "arácnidos". Los arácnidos y los insectos difieren tanto como los pájaros y los peces, ejemplifica el experto.
Las arañas generan una gran aportación a los ecosistemas, ya que son depredadoras de miles de insectos y plagas agrícolas.
Estudios han establecido que, en algunos ecosistemas, más del 40 por ciento de la biomasa de insectos pasa por las arañas; esto las convierte en las controladoras número uno de esas poblaciones.
Segundo mito: las arañas nos quieren picar
¿Todas las arañas tienen la intención de mordernos? A las arañas no les interesa interactuar con los humanos, por eso, la mayoría de la población no sufrirá picadura alguna en toda su vida. Existen más de 50 mil especies de arácnidos en el planeta, muy pocas entran en contacto con nosotros.
Si una persona despierta con alguna roncha o llaga en la piel, es común que culpe a alguna araña. Dimitar Stefanov Dimitrov, experto en evolución de arañas del Museo Universitario de Bergen en Noruega, afirma que casi nunca hay motivos para creer que una de ellas sea la responsable.
Los dos pequeños colmillos de la mayoría de estos invertebrados apenas dejarían una marca que pudiera ser detectada; el especialista afirma:
La mayoría de las mordeduras que la gente cree que son de araña probablemente no lo son
Tercer mito: cada año nos tragamos algunas arañas mientras dormimos
A lo largo de los años, se ha afirmado que nos tragamos hasta ocho arácnidos al año mientras dormimos. Según Rod Crawford, no existe ningún estudio verificado, registro médico u prueba alguna de que una araña intente meterse en la boca de una persona.
El experto afirma que estos pequeños seres no quieren tener nada que ver con las cavidades húmedas, con las bocas abiertas para respirar pesadamente y roncar.
La corriente de aire va a molestar a los pequeños pelos sensoriales que tienen por todo el cuerpo
Cuarto mito: las arañas ponen huevos en las puntas de los plátanos y otras frutas
Aunque hay arañas excavadoras, que pueden penetrar en la tierra, por ejemplo, no podrían atravesar algo tan duro como frutas o plantas, sostiene Dimitar Stefanov Dimitrov.
Ocasionalmente, las arañas pueden encontrarse en los cargamentos de plátanos, arrastrándose fuera de las cajas en las que viaja la fruta. Esto se debe a que un paquete de plátanos, uvas u otros alimentos de este tipo, puede ser un buen lugar para esconder un saco de diminutos huevos, a salvo de la intemperie y los depredadores. Si este fuera el caso, los huevecillos estarían a la vista y fuera de la fruta.
Quinto mito: las arañas pueden poner huevos bajo la piel
Una mujer volvió de unas vacaciones en un lugar cálido y exótico, pero se dio cuenta de un bulto en la mejilla que late y crece. Ella, preocupada, acudió al médico, quien le abre la roncha y cientos de pequeñas arañas salen de ese punto.
Esta historia, o alguna parecida, no han ocurrido, sostiene Rod Crawford, solo se trata de leyendas urbanas, probablemente inspiradas en algún cuento o historia de ficción.
La mayoría de estos pequeños animales no tendrían los medios, ni el interés de excavar en la gruesa carne humana y poner allí sus huevos.
Sexto mito: las arañas se meten en casa por los desagües y las alcantarillas
Existen arañas que viven en el exterior y otras en el interior, por lo que es muy poco probable que estas especies diferentes se encuentren.
Por ese motivo, estos invertebrados no entran por tuberías, ni desagües.
Si encuentras una araña en la bañera o cerca del lavabo, probablemente sea una araña doméstica que intenta beber agua.