Durante las fechas decembrinas, cientos de personas festejan o pasan el tiempo explotando pirotecnia, pero esta es una práctica que pone en riesgo la salud y el bienestar de los perros de la calle y los del hogar, pues estos sonidos fuertes en ellos pueden desarrollar estrés o provocar que estos se lesionen así mismos.
Te podría interesar
Los perros, al no comprender el origen del ruido, su instinto de supervivencia les indica que están en peligro y mientras estos no comprendan de donde proviene la “amenaza” puede someterlos a niveles de estrés elevados, los cuales podrían prolongarse y hacer estragos en su salud.
¿Por qué los perros se asustan con la pirotecnia?
El oído de los perros es mucho más sensible y perceptivo que el de los humanos y como antes fue mencionado, estos no identifican de donde provienen estos sonidos que los toman por sorpresa.
Gracias a su agudeza auditiva, los canes pueden percibir estos ruidos extremos y sorpresivos hasta tres veces más que los humanos, por lo que la sensación no es nada agradable para ellos.
Esto puede generar una respuesta de lucha o huida, pudiendo lastimar a su dueño por el temor que sienten, además en respuesta a este malestar, los canes pueden ladrar por miedo, intentar huir, esconderse, demostrar ansiedad, inquietud, jadeos y quejidos.
Para intentar a calmar o ayudar a tu perro, pueden permitirle ingresar a la casa y dejar que se esconda en donde decida o proveerle de un lugar seguro.