Una mujer que fue acusada de casi matar de hambre a sus tres nietos, tanto que dos de los niños estaban a punto de morir cuando fueron encontrados. Fue sentenciada a 25 años de prisión y 10 años de libertad condicional.
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Samantha Foster cambió su declaración de inocente a culpable de los tres cargos, y después de dos días completos de testimonio, el jurado decidió su castigo.
Casi mata de hambre a sus tres nietos
El testimonio describió que la inanición de sus nietos era tan severa que dos de los niños estaban a días de morir. Foster fue entregada por su hija de 11 años, quien envió un mensaje de texto al 911 para pedir ayuda.
Después de escuchar las peticiones de clemencia de la familia de Foster, el jurado condenó al acusado a 25 años de prisión por dos cargos y 10 años de libertad condicional por el tercer cargo.
Samantha Foster, de 41 años, está encarcelada y enfrentaba tres cargos por delitos graves.
Está acusada de poner en peligro a sus tres nietos de 4, 2 y 1 años. En su declaración jurada la abuela contó que obligaba a los niños a comer sus propias heces, y también eran golpeados 'sin motivo'
El tío abuelo de Foster, Dueis Jahns, habló sobre quién es ella.
“Creo que cuando comenzó esto, realmente quería a sus nietos, pero no me di cuenta de la magnitud de lo que podría pasar”.
Jahns dijo que ha criado a Foster desde que tenía 1 año. “Samantha no es un demonio”, dijo.
La primavera pasada, Foster acogió a sus tres nietos. Se le otorgó la tutela temporal por primera vez después de que el padre de los niños fuera a la cárcel.
A fines del año pasado, se le otorgó la custodia. Los niños fueron sacados de su casa después de que las autoridades dijeran que los encontraron viviendo en condiciones insalubres.
Le preguntamos a Jahns si estaba sorprendido de ver el estado de la casa, dijo:
“Sí, señora. Eso es algo que quería expresar. No hay forma de que apruebe o esté de acuerdo con lo que he visto en esa casa. No hay excusa para ello”.
Dijo que fue a la casa de Foster el otoño pasado y la vio periódicamente. Además, no había indicios de que los niños estuvieran en peligro o que la casa estuviera sucia.
“No tenía idea”. Si tuviera alguna idea, habría ido a CPS”.
Dijo que su esperanza es que los niños encuentren un hogar amoroso.
“No tienen control. Espero que los niños sean colocados en un hogar”.
Foster, quien casi mata de hambre a sus tres nietos, será elegible para libertad condicional en 12 años y medio. Su sentencia de libertad condicional comenzará después de que complete su tiempo en prisión.