El día de ayer, la OTAN emitió una alerta pues Rusia ha movilizado el submarino K-329 Belgorod, portador del misil nuclear Poseidón, también conocido como “el arma del Apocalipsis”.
El submarino Belgorod es el más grande del mundo, mide 184 metros de largo y mueve alrededor de 30.000 toneladas.
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Sin embargo, lo que da miedo de este submarino no es su tamaño, pues lo que realmente pone en alerta a la OTAN es su armamento, más concretamente, por ser la nave nodriza de seis torpedos nucleares Poseidón, los más grandes jamás construidos y que representan un peligro para la humanidad.
La OTAN ha mencionado que tienen el temor de que el submarino realice una misión de prueba para Poseidón, un proyectil que puede moverse hasta 10.000 kilómetros bajo el agua y causar una explosión cerca de la costa para provocar un tsunami radiactivo.
El proyectil Poseidón puede llevar consigo una cabeza nuclear de dos megatones.
Lo aterrador es que estos torpedos pueden recorrer 10.000 kilómetros de manera prácticamente indetectables, y de alcanzar la costa pueden generar un tsunami radioactivo de 500 metros de altura y destruir cualquier ciudad por completo.
La preocupación también existe pues al tratarse de un arma submarina no tripulada, no existe en el mundo un dispositivo, al menos conocido, ni un sistema que sea capaz de detener al Poseidón.