Un hombre sentenciado a muerte en Texas, que en varias ocasiones ha apelado su condena, se ha vuelto viral en redes debido a que se sacó los ojos y se los comió. Los hechos se presentaron en años diferentes, es decir, primero fue uno de sus glóbulos y en otro año el otro.
Se trata de Andre Thomas, quien es responsable de asesinar a su esposa y sus dos hijos en el 2005. En aquel año dijo a los miembros del jurado que no actuaron correctamente y dijo que el crimen lo cometió por que Dios se lo pidió.
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Confesó el terrible crimen
Tras declararse culpable de matar a Laura Christine Boren, de 20 años; a su hijo, Andre Lee, de 4 y a la niña Marie Hughes, Andre Thomas fue sentenciado a muerte.
Al pasar cinco días del juicio, el prisionero se quitó uno de sus ojos, quedó tuerto. Su intención era quitarse la vida, pero no lo logró.
Los dos ojos se los comió
En el 2010, el hombre intentó de nuevo atentar contra su vida, se arrancó el otro ojo, y se lo comió, justo como lo que hizo con el primero en el 2005.
A su familia la mató a cuchilladas, incluso intentó arrancar el corazón de las víctimas para, según él, liberarlos del mal.
Tras arrancarse lo ojos y comérselos, los abogados de Thomas han apelado la sentencia, en una ocasión fue en el 2008 y la otra en el 2021, pero han sido rechazadas.
Defensa sin fundamento
Thomas ha argumentado que la condena es por racismo ya que su esposa era de piel blanca, por lo que señala que el jurado no fue imparcial. Se encuentra prisionero en un centro de salud mental, pero la condena a muerte se mantiene.
Los abogados buscan que Andre pase sus días en la prisión, pero que no sea ejecutado.
Un hombre sentenciado a muerte en Texas, por matar a su esposa y dos hijos en el 2005, se sacó sus ojos y luego se los comió.