Una alerta nacional de terrorismo fue emitida el viernes por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos ya que prevén ataques de extremistas violentos dentro de su territorio.
Las autoridades de seguridad interna del país piensan que algunas personas o grupos podrían aprovechar el levantamiento de las restricciones del confinamiento para lanzar ataques.
Te podría interesar
Hay temor por ataques terroristas
La alerta nacional de terrorismo no habla de amenazas contra alguien en específico, sino de peligros potenciales de una combinación compleja que podría mover a terroristas internos, quienes estarían inspirados por diversos motivos sociales como el odio racial o influencias que provengan de otros países.
Durante el periodo de confinamiento por covid-19 este tipo de amenazas fueron exacerbadas, y frecuentemente se generaron teorías de conspiración y profundizó el enojo contra el gobierno por el cierre de la economía.
En momentos en que la situación de la pandemia mejora, los estrategas de seguridad afirmaron que presentarán nuevos peligros.
“Extremistas violentos pudieran tratar de explotar el levantamiento de restricciones en Estados Unidos para realizar ataques contra una amplia gama de objetivos luego de que los límites previos a la capacidad en sitios públicos redujeron las oportunidades para ataques letales”
Sin tener un motivo en específico para investigar, pero de acuerdo a experiencias históricas previas, los extremistas, motivados por odios raciales y étnicos atacan instituciones religiosas y propiedades de particulares con gran número de seguidores.
Una alerta anterior finaliza mañana. Esta acción fue emitida como respuesta a los ataques por grupos de extrema derecha afines a Donald Trump y a los sectores radicales de la derecha norteamericana al Capitolio en Washington, un hecho inédito en el país.
Por lo tanto, el boletín del Sistema Nacional de Avisos emitido hoy, es una extensión de la anterior alerta nacional de terrorismo por los ataques de aquella terrible mañana del 6 de enero en contra el Capitolio en Washington que agarró por sorpresa a las autoridades de seguridad de la Unión Americana.