La mayoría de diputados del Congreso de Tamaulipas, encabezados por Morena, votaron ayer para retirar los súperpoderes que le dejó el exgobierno de Cabeza de Vaca al fiscal estatal Irving Barrios.
Con esta modificación, regresan el control al poder ejecutivo, encabezado por Américo Villarreal, del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública, a la Unidad de Inteligencia Financiera y Económica (UIFE), los centros de mando de seguridad C4, C5.
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En una reunión extraordinaria, y a pesar de que los diputados del PAN y PRI se ausentaron para intentar romper el quórum, finalmente la mayoría votó para que la Secretaría de Seguridad vuelva a tener el control de los centros de mando conocidos como C4, que integra al Centro Estatal de Evaluación y Control de Confianza. También le quitan a la Fiscalía estatal el control del Secretariado Ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública (SESESP) y el Centro General de Coordinación, Comando, Control, Comunicaciones, Cómputo e Inteligencia (C5).
Esas leyes fueron cambiadas por la mayoría del PAN-PRI y sus aliados el 1 de julio de 2022, tres meses antes que terminara la administración de Cabeza de Vaca.
Con la votación de ayer, también eliminaron la Carta de Antecedentes de no Corrupción para proveedores del gobierno estatal, que estaba bajo control de la Fiscalía estatal.
El fiscal de Tamaulipas también tenía bajo su control la Unidad de Inteligencia Financiera y Económica (UIFE), que ahora regresa a la Secretaría de Finanzas. Estas modificaciones permitirán que el poder ejecutivo, encabezado por Américo Villarreal, vuelva a tener el control de las anteriores oficinas.
MARRULLERÍAS DEL PRIAN
Los diputados del PAN y sus aliados del PRI intentaron romper el quórum, que es la cantidad mínima de diputados que asisten a una reunión plenaria para poder aprobar o rechazar iniciativas.