Mauricio Garcés nació en Tampico, Tamaulipas, un 16 de diciembre de 1926, fue un actor y comediante, interpreta el personaje de un hombre seductor, amante y el más deseado por las mujeres.
Garcés en realidad se llamaba Mauricio Feres Yazbek, y desde niño se mudó a la Ciudad de México con su familia, en busca de un mejor futuro.
Te podría interesar
Mauricio llegó a estudiar ciencias químicas en la universidad, pero por cuestiones económicas tuvo que dejar su carrera para apoyar económicamente su hogar.
Estuvo trabajando en varios empleos, hasta que unos tíos le ayudaron a incluirlo en el reparto de La muerte enamorada de 1950 y desde ese año fue considerado para más proyectos en la pantalla chica y grande.
Mauricio Garcés se volvió muy popular en producciones como Click, fotógrafo de modelos (1968), El criado malcriado (1968), Departamento de soltero (1969), Fray Don Juan (1969) y Modisto de señoras (1969) que hasta la fecha son las películas que más transmiten hoy en día.
Mauricio Garcés nunca se casó ni tuvo novia
El actor desde que se volvió famoso nunca se le conoció alguna novia, tampoco contrajo matrimonio, vivió con su madre hasta que ella falleció.
Mauricio durante su carrera fue motivo de rumores acerca de sus preferencias, incluso se le relacionó de mantener una relación con el ex presidente de México, Manuel Ávila Camacho, también con el actor Enrique Rambal quién moriría de un ataque al corazón.
Todo lo anterior quedó en rumores, nada se pudo comprobar, dado que él nunca habló públicamente sobre su sexualidad y esos secretos se los llevaría a su tumba.
Mauricio Garcés Perdió su salud, carrera y fortuna
Unas de las aficiones que tenía Garcés era el cigarro, el actor fumaba cigarro tras cigarro, en la mayoría de las escenas que grabó, en todo momento se le ve fumar, pero esto no solo era frente a las cámaras sino también en la vida real.
El cigarro le ocasionó enfisema pulmonar y problemas en su garganta, por lo que comenzó a perder la voz, no tuvo más remedio que operarse, además de que ya no veía bien de un ojo.
Sus últimos años los dedicó al juego, esa era su mayor pasión, las apuestas en juegos de azar, dicho problema lo hizo perder su fortuna y terminó en la miseria.
El 27 de febrero de 1989, con 62 años de edad, Mauricio Gracés fue encontrado muerto en la recámara de su departamento ubicado en la Ciudad de México. Los periódicos de la época informaron que se le había realizado una autopsia, la cual arrojó que la causa de su muerte se debió a un paro cardíaco.