El Maratón de Monterrey se tiñó de luto tras la trágica muerte de Juan Mendoza Luna, un experimentado corredor de 49 años y originario de Querétaro.
El fatal incidente ocurrió poco después de que Mendoza Luna cruzara la línea de meta en el Parque Fundidora, marcando el fin de su participación en la décima sexta edición de la competencia, que congregó a 7 mil 500 corredores en la mañana del 10 de diciembre.
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Muere maratonista
Fernando Castilleja, director médico del maratón, reveló que, a pesar de recibir pronta atención médica en el lugar, Mendoza Luna fue trasladado al Hospital Clínica Dos del Seguro Social.
Lamentablemente, el maratonista perdió la vida poco después de llegar al final de la carrera, a pesar de los esfuerzos médicos.
Mendoza Luna, un veterano con un impresionante historial de 40 maratones, logró completar la carrera con un tiempo de 3 horas, 3 minutos y 7 segundos, alcanzando el puesto 127 en la clasificación general.
Ediberto González, director del maratón, expresó su pesar por la trágica pérdida y recordó que todos los participantes cuentan con un seguro que cubre los gastos fúnebres.
Se empaña la carrera
El Maratón de Monterrey, a pesar de celebrarse con entusiasmo y participación masiva, se vio empañado por este triste suceso, recordándonos la importancia de la salud y la seguridad en este tipo de eventos deportivos.
La comunidad runner y los organizadores se unieron en luto por la partida prematura de Juan Mendoza Luna.
¿Por qué hay muertes en las carreras?
La muerte repentina de algunos maratonistas durante las carreras es un fenómeno raro, pero puede tener diversas causas. Algunas de las razones más comunes incluyen problemas cardíacos, condiciones médicas subyacentes no detectadas, hasta desbalances electrolíticos ante la pérdida excesiva de sales minerales y electrolitos durante una carrera larga.
También la fatiga extrema puede afectar la coordinación y la capacidad del cuerpo para mantener una técnica de carrera segura, aumentando el riesgo de caídas y lesiones graves.
Por otra parte, el consumo de sustancias, como estimulantes o drogas de mejora del rendimiento, puede tener efectos adversos en la salud cardiovascular y contribuir a eventos trágicos.
La investigación continua en medicina deportiva y la conciencia sobre la importancia de los exámenes médicos regulares pueden contribuir a minimizar estos riesgos. Sin embargo, la naturaleza extrema del esfuerzo físico en una maratón siempre conlleva algún grado de riesgo.