Ahora que quedó definida la final entre Argentina y Francia, recordamos la historia de los mundiales anteriores, sus sedes, los problemas geopolíticos que los han envuelto y la fiesta que significa un mundial de futbol.
Desde que los ingleses inventaron el futbol, con su nuevo juego suplantaron las guerras por el deporte. Al ser la primera potencia económica del siglo XIX, distribuyeron el juego inventado por ellos por todos los puertos del mundo.
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Los Mundiales de futbol
Del primer mundial de Uruguay un 13 de julio de 1930, hasta llegar al "mundial del fascismo" en 1934, cuando Mussolinni auspició el evento un año antes de que empezara la guerra los Mundiales empezaron a ganar trascendencia.
Jules Rimet en 1938 llevó la copa a Francia a pocos meses de empezar la guerra más mortífera de la historia.
La Segunda Guerra Mundial interrumpió la organización de los mundiales hasta 1950 en Brasil, el país más futbolero del planeta.
Entre la samba y el buen futbol, los cariocas sintieron en carne viva el famoso "maracanazo". Un gol de Uruguay ensombreció a todo un país y le arrebató la posibilidad de su primer campeonato.
En 1954, el equipo de una Alemania aún en escombros, diezmada y dividida, triunfó en Suiza, lo que provocó una luz de alegría entre tanta tragedia.
Cuatro años después, en Suecia, Pelé lleva a brasil a su primer campeonato mundial, cumpliendo con la promesa que de pequeño le hizo a su padre.
En Chile 62, los cariocas nuevamente levantaron la copa y se convirtieron en el primer bicampeón del mundo.
En 1966 los creadores del futbol, Inglaterra, organizaron y triunfaron en su propia tierra.
En 1970 una selección legendaria brasileña, la mejor de todos los tiempos, pisó el césped del Estadio Azteca. Pelé junto a grandes estrellas enfrentaron a Italia en la final y se llevaron su tercer trofeo.
En 1974 la Naranja Mecánica impone un nuevo estilo de futbol impresionante, el futbol total. Alemania Federal queda campeón ganándoles, pero derrotando primero a la otra Alemania, la Democrática.
En 1978 a Argentina le dieron la sede del mundial cuando era un país democrático, pero entre la obtención de la sede y el inicio del mundial hubo un golpe de estado y la fiesta se hizo bajo la sombra de una de las dictaduras más sombrías de la historia de América Latina.
La sospecha de una derrota "comprada" por Perú al dejarse ganar 6-0 para que Argentina avanzara, manchó la justa deportiva.
España en 1982, apenas a unos meses de salir de la dictadura de Francisco Franco le toca ser sede del campeonato mundial en plena transición a la democracia. Ese año ganó Italia con su defensiva brutal con el autobús echado para atrás. Italia, campeón.
En 1986 México auspició el Mundial por la imposibilidad de realizarse en Colombia, que era la sede oficial original. Este evento se lo llevó de manera total Diego Armando Maradona, que llevó a Argentina de la mano a ganar su segunda copa, humillando de paso a Inglaterra, con quienes anteriormente tuvieron un conflicto bélico por la Guerra de las Malvinas.
En 1990, el Mundial de Italia fue marcado por la nueva distribución geográfica de Europa. Fue la última vez que Yugoslavia jugó como país, ya que después se fraccionó en varios países, mientras que Alemania tenía pocos meses de haber iniciado la unificación para ganar el Mundial y alegrar a su pueblo.
Estados Unidos organizó el Mundial de 1994 y con ese mundial inició una etapa de explosión mediática y publicitaria, lo que complicó el espíritu del futbol contra la guerra de marcas y patrocinios. Brasil sale campeón con una selección que se consideraba con menos expectativas que otros seleccionados cariocas de mundiales anteriores.
1998 es el Mundial de Francia, puso a prueba la recién Unión Europea. Zinedin Zidane, al mando de un equipo lleno de inmigrantes se llevó la edición en su propio territorio.
Corea y Japón organizan la Copa 2002. Ambos países que anteriormente fueron naciones enemigas, en esta ocasión el futbol sirvió para unir a las naciones, después de años de complicadas situaciones definidas por conflictos bélicos. En este evento futbolero Brasil levanta su quinto trofeo.
En el 2006 Alemania organizó la justa futbolera, con situaciones curiosas como la de Serbia, que a pesar de ser un equipo nacional, al terminar el torneo su país ya no existía. Zinedine Zidane no pudo levantar una nueva copa, pero los Italianos se van a casa con la Copa.
En 2010 se organiza la primera copa en África, en el sur del continente, Sudáfrica, después de años de apartheid y una lucha incesante por los derechos civiles por Nelson Mandela, refrendaron, mediante el futbol, un reconocimiento a su esfuerzo social. España sale campeón.
2014, en el mismísimo estadio Maracaná, con Brasil organizando la fiesta, pierde ante Alemania en la peor goleada que ha recibido en su historia. Posteriormente, los teutones se levantarían como campeones.
La Rusia de Putin llega al 2018 y utiliza el Mundial como un refrendo de sus políticas de gobierno como potencia emergente después de años bajo un régimen socialista.
Francia levanta su segundo campeonato mundial con su equipo nuevamente lleno de inmigrantes, sin duda, un equipo multicultural.
Estamos a unos días de que termine el Mundial en Qatar, un país con mucha carencia de derechos humanos que serían inadmisibles en una sede del mundial. Pese a todo, la final ya está a unos días y pronto sabremos si los galos o los argentinos serán los próximos tricampeones del mundo,
Sin duda, los mundiales se hacen para hacer a la gente feliz. Se sufre, pero se goza, pero lo más importante es cómo un balón es capaz de unir al mundo.